El censo realizado por el Grupo Ornitológico Oscense, junto con un numeroso voluntariado que se sumó a la iniciativa, no deja lugar a dudas. Los búhos macho quieren seguir viviendo en el cerro de San Jorge. Hay 6 parejas confirmadas durante las últimas semanas que están preparando su nido, incluso alguna ya incubando.
Más de 70 personas participaron en esta actividad, cuyo objetivo era conocer más detalladamente la cantidad de estos individuos que inician ya su periodo reproductor en el cerro de San Jorge. Este, se ha dividido en 6 sectores, en cada uno de los cuales había un responsable del Grupo Ornitológico Oscense. Durante 20 minutos, a la vez, se han contado los cantos de machos y hembras de cada sector, dando como resultado la confirmación de 6 parejas, bastantes más de las que se esperaban.
Uno de los grandes problemas en la conservación de esta especie es su desconocimiento, por lo que antes de cualquier actuación que pueda alterar su hábitat es conveniente realizar un estudio detallado y durante al menos un ciclo vital completo. Son muy sensibles a la alteración de su hábitat, según otros estudios realizados en el Estado español, y son muy selectivos escogiendo su hábitat, siempre en árboles con suficiente protección, densidad y una fácil salida en caso de emergencia.

Las personas que participaron pudieron conocer algo más sobre la alimentación, costumbres y hábitat de esta especie, así como escuchar sus cantos y disfrutar de su vuelo, elegante y sigiloso. “Más de 20 niños y niñas disfrutaron de la observación de una especie que vive mucho más cerca de nosotros de lo que podemos imaginar, así como depende también en gran medida de que sepamos protegerla y cuidar su hábitat como merece”, señalan desde el Grupo Ornitológico Oscense.