Tras dos años desde sus encarcelamientos, Oriol Junqueras, Raul Romeva, Quim Forn, Jordi Sànchez, Jordi Cuixart, Jordi Turull, Josep Rull, Carme Forcadell y Dolors Bassa han conocido este miércoles la propuesta de las cárceles catalanas: segundo grado, el régimen penitenciario más común y que implica las mismas condiciones de reclusión que han tenido hasta ahora.
En rueda de prensa, el secretario de Medidas penales de la Generalitat, Amand Calderó, ha anunciado la propuesta de clasificación de las juntas de tratamiento de las prisiones de Lledoners, Mas Enric y Puig de les Basses, lo que ahora abre un plazo de dos meses para que la consellería de Justicia ratifique su resolución.
Ha sido el propio Calderó quien ha apuntado que la decisión se ha adoptado tras un "intenso debate" y "sin unanimidad". No obstante, clasificación de los presos y presas catalanas podrá ser recurrida por la Fiscalía, que al final del juicio oral reclamó al Supremo que obligase a cumplir la mitad de la pena antes de obtener beneficios penitenciarios. En última instancia, la decisión quedará en manos del Supremo.
Este martes, las defensas de los dirigentes de ERC encarcelados ya previeron que se les aplicaría el segundo grado y anunciaron que lo recurrirían, y desde JxCat, su abogado, Jordi Pina, mostró el firme convencimiento de que la clasificación debería ser de tercer grado, un régimen de semilibertad.