Las gélidas temperaturas que estamos viviendo estos últimos días tienen una repercusión directa en el precio de la luz. De esta forma, y según un análisis realizado por Facua-Consumidores en Acción, “la factura de la luz del usuario medio de comienzos de enero es la segunda más cara de la historia”. “Así, con las tarifas de los primeros quince días del año, un usuario medio pagaría 84,57 euros mensuales (impuestos incluidos), sólo por debajo de los 88,66 euros de entre enero y marzo de 2012”, afirman.
De hecho, el propio ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, explicaba este pasado miércoles que la factura de la luz se va a encarecer hasta 100 euros al año. “Cuanto más frío hace hay más consumo y demanda de electricidad y se tiene que producir con medios más caros. Esto es así en España, pero está siendo mucho peor en el centro de Europa, especialmente en Francia (...)”, aseguraba el ministro.
“Tenemos además un problema meteorológico importante: no ha llovido prácticamente nada, con lo cual el agua es escasa y la electricidad más barata es la que se produce con agua y tampoco ha hecho viento y antes de la reforma energética la energía eólica era más cara, pero después de la reforma ésta ayuda a bajar el precio", señalaba Nadal.
Unos argumentos, los esgrimidos por el ministro, que culpan de la subida de la tarifa únicamente a las condiciones meteorológicas, cuando en realidad son las prácticas oligopolísticas de las empresas eléctricas las que encarecen, sin apenas control gubernamental, el precio de la luz.
Por ello, desde Facua se “exige la intervención del sector para que sea el Ejecutivo el que fije periódicamente una tarifa asequible, dado que el sistema de fijación de precios existente en el mercado de la generación español fomenta la especulación y los abusos”.
Además, la asociación demanda la bajada del IVA que se aplica a la electricidad, del 21%, “impropio de un servicio esencial”. En este sentido, reclama al gobierno que baje el IVA de la luz al tipo mínimo permitido por la normativa europea, “legislación que también debe ser modificada para facilitar una bajada mayor”.
Al mismo tiempo, los cortes de luz por impago realizados por las empresas eléctricas se situaron en más de 650.000 en el año 2015, “de los que más de 83.000 fueron interrupciones de suministro que duraron más de un mes”. Un hecho que refleja la nula sensibilidad del gobierno español para con las personas que sufren la mal llamada, actualmente, ‘pobreza energética’.