La Residencia de personas mayores Alto Galligo en Samianigo pasará a gestión pública

El Ayuntamiento de Samianigo aprobó en el último pleno una moción presentada por Cambiar Sabiñánigo “para municipalizar la Residencia Alto Gállego, y acordó considerar como prioritario el asumir la gestión directa del servicio al finalizar el actual contrato de adjudicación”.

Desde Cambiar Sabiñánigo aseguran que “para hacerlo factible, es necesaria la creación de un ‘Organismo Autónomo Local’ que ha de ir acompañado de un informe que demuestre su sostenibilidad financiera”.

“Sostenibilidad que se facilitaría si el Departamento de Ciudadana y de Servicios Sociales del Gobierno de Aragón se implicara apoyando la iniciativa con una pequeña partida económica durante un tiempo determinado. No obstante este proceso, es imposible que llegue a buen puerto si el equipo de gobierno municipal del PSOE no realiza todas las acciones necesarias para hacer realidad el acuerdo adoptado”, entienden desde Cambiar Sabiñánigo.

Para esta formación política “en los momentos más difíciles de la pandemia, los responsables políticos expresábamos constantemente nuestro compromiso con la mejora de los servicios públicos, especialmente, con los destinados a atender a las personas mayores. Sin embargo, un año después, los recursos públicos se vienen destinando preferentemente a atender las reclamaciones de los sectores económicos afectados por la crisis sanitaria”.

“Los más vulnerables, como lo son muchas de las personas mayores que pasan su vejez en las residencias, continúan invisibilizados por las instituciones a pesar de haber sido uno de los colectivos más perjudicados por la pandemia”, recalcan, y, aseguran que “incomprensiblemente, no se vislumbra ningún plan de rescate por parte de las instituciones que permita dignificar sus condiciones de vida”.

Desde la formación serrablesa aseguran que “las personas mayores sufren un sistema residencial privatizado en su práctica totalidad, altamente mercantilizado, con una agresiva penetración de fondos de inversión y grandes sociedades multinacionales. Estos instrumentos financieros, lejos de velar por la dignidad y el bienestar de los residentes, están diseñados para obtener la máxima rentabilidad de sus inversiones, no dudando en escatimar recursos y servicios si con ello pueden aumentar sus beneficios. Dotados de una ética más que cuestionable, que se traduce en estructuras empresariales ideadas para eludir impuestos y, en la práctica, diseñadas para impedir la identificación de sus verdaderos propietarios y el origen del dinero con el que operan, estos instrumentos financieros han sido puestos a gestionar un área tan sensible como es el de la atención de las necesidades de las personas mayores. Y esto, simple y llanamente, no es socialmente justo ni aceptable”.

Según el criterio de Cambiar Sabiñánigo “a este desolador panorama, también contribuye la deficiente legislación aragonesa, que establece ratios de trabajadores y trabajadoras claramente insuficientes y fomenta condiciones laborales de precariedad que, a su vez, tienen un claro impacto negativo en la calidad del servicio”.

“El esfuerzo de las instituciones públicas para hacer cumplir lo estipulado por las leyes y los contratos particulares de cada residencia es temerariamente insuficiente. Los servicios de inspección aragoneses están diseñados para comprobar procedimientos pero no la calidad del servicio, y su plantilla está infradotada: en Aragón contábamos en 2019 con tan solo 9 inspectores para 19.225 plazas residenciales”, denuncian, y recuerdan que “los ayuntamientos propietarios de residencias municipales, responsables últimos del servicio prestado, pero cuya gestión tienen adjudicada al sector privado, carecen de capacidad para suplir las funciones de la inspección y hacer cumplir las cláusulas de los contratos de adjudicación. Las empresas saben que a los ayuntamientos les es muy difícil hacer efectiva la amenaza de rescatar la concesión del servicio ante graves incumplimientos”.

Desde Cambiar Sabiñánigo están convencidas “de que la gestión directa por parte del ayuntamiento del servicio de nuestra residencia municipal Alto Galligo mejoraría su calidad al ser el personal municipal el responsable directo del servicio y de la adecuada prestación del mismo. Además, permitiría adoptar las medidas necesarias para articular un modelo residencial basado en los derechos de las personas en vez de en el actual modelo coste/beneficio”.

Por todo ello, Cambiar Sabiñánigo anuncia que trabajará “desde este mismo momento para que los acuerdos adoptados se cumplan. Para ello, comenzamos reclamando del Departamento de Ciudadanía y Servicios Sociales del Gobierno de Aragón el apoyo financiero necesario para facilitar esta iniciativa, cuya finalidad es hacer efectivo, de una vez por todas, el compromiso con las personas mayores que el Ayuntamiento de Samianigo adquirió con la creación de la residencia municipal, garantizándoles la dignidad y la adecuada calidad de servicio que cabe esperar de una institución pública”.

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