Tras las "inmediatas aunque escuetas" explicaciones que ha dado la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) por la aparición de nuevas grietas en la ladera derecha de Yesa, las asociaciones contrarias al recrecimiento (Asociación Yesa+No, Lanak Gelditu Elkartea y Asociación Río Aragón) aportan nuevas fotografías de las mismas y confirman que se trata de nuevas grietas con una profundidad no observada desde los episodios de 2013, "en los que pese al maquillaje de la CHE con declaraciones similares, llegaron a desplazar varios centímetros el propio cuerpo de la presa y terminaron con la expropiación y derribo de 103 viviendas".
Además, consideran "una entelequia más propia de un grupo cómico que de un organismo oficial competente las afirmaciones de la Confederación en esta misma respuesta cuando alega que estos movimientos 'no afectan a la estabilidad global de la ladera', a sabiendas de que no existe estabilidad en una ladera que está moviéndose desde que comenzaron las obras de recrecimiento".
Por último, las asociaciones recuerdan que "esto no es una opinión ni una postura propia sino un hecho constatado por ejemplo en el último informe publicado al respecto, que define la situación de la ladera como de 'equilibrio estricto', que es un concepto utilizado para referirse a la ausencia de margen para la seguridad (Factor de Seguridad = 1)".