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El fin de semana del 21, 22 y 23 de octubre se celebró en Huesca el “Curso de Economía Crítica” que, dentro de las Jornadas “Jueves Críticos”, organiza Ecologistas en Acción, entre otras asociaciones y colectivos. Fue todo un éxito de participación, con más de 70 personas inscritas.
El curso fue impartido por el colectivo Taifa, un grupo de personas que mayoritariamente provienen de las facultades de economía, ya sea como alumnos, ex-alumnos o profesores y profesoras, como dicen en su web “descontentas con el enfoque económico dominante de las universidades actuales, completamente monopolizadas por la corriente de pensamiento neoclásico y neoliberal, con muy poca capacidad explicativa de lo que sucede en el seno de nuestra sociedad”.
El curso contó con tres partes diferenciadas. La primera fue una introducción al sistema económico en el que nos encontramos. La segunda fue una explicación de distintos conceptos que no solemos llegar a tener muy claros, como el funcionamiento de la bolsa, el sistema financiero, como ha llegado a colapsar este sistema y se ha desatado la crisis en la que nos encontramos, los intentos que se están haciendo para salir de la crisis, la deuda, la recapitalización de los bancos… todo un mundo paralelo explicado de una forma clara y apta para ser entendida por cualquier persona. Para finalizar se hizo una puesta en común de posibles alternativas a este modelo económico en crisis.
Como resumen, a grandes rasgos se podría decir que el modelo económico capitalista en el que nos encontramos se basa prácticamente en la explotación de la fuerza de trabajo de las personas para de ahí sacar un beneficio que se invierte, a parte de para cubrir las necesidades básicas, para reinvertirse y sacar de este todavía más beneficio. Una rueda en la que muchas personas acaban en situación de exclusión, aplastadas por esta o en permanente explotación de su vida. Un modelo que arrasa los recursos naturales sin contar con que puedan ser finitos, y confiando en que de alguna manera se encontrará la forma de continuar esta espiral de la que una vez iniciada es tan difícil salir a nivel mundial. Un modelo que no prima la solidaridad entre las personas o la colectividad si no la competitividad y la extracción del mayor beneficio a cualquier coste.
Como propuesta de cambio se habló de la creación de sociedades colectivas, donde no se explote ni malgaste los recursos, donde nadie quede excluido de cubrir sus necesidades básicas, donde toda persona pueda aportar algo a la sociedad, donde se produzca solo lo preciso para tener nuestras necesidades vitales y sociales cubiertas. La especulación, las ganancias desmesuradas de particulares y empresas solo benefician a unos pocos y perjudican a la sociedad en general.
Democratizar la economía, defender lo público, recuperar los valores, involucrar al sistema educativo, aprovechar los recursos locales…
Muchas ideas y propuestas en un tiempo que se nos hizo realmente corto, y en el que nos quedamos con ganas de seguir debatiendo, proponiendo alternativas y empezando a forjar ámbitos, colectividades y estados, siguiendo estos principios de solidaridad, justicia y apoyo mutuo.
Esperamos que pronto se vuelva a organizar otro curso de estas características (en Zaragoza próximamente Ecologistas en Acción va a organizar este mismo) como concreción de conceptos que no dio tiempo a contemplar y como continuación y ampliación de este tema tan candente y preocupante.
Ecologistas en Acción Huesca
