El profesorado del IES Pedro de Luna de Zaragoza pide la paralización de la LOMCE

La Asamblea de profesorado del IES Pedro de Luna, de Zaragoza, ha mostrado su apoyo, en un comunicado, al manifiesto por la paralización de la LOMCE en Aragón y advierte que, de no retrasar su implantación, el comienzo del curso 2015/2016 puede ser caótico.

La Asamblea de profesorado del IES Pedro de Luna, de Zaragoza, muestra su apoyo al manifiesto por la paralización de la implantación de la LOMCE en Aragón suscrito, entre otros, por la Plataforma por la defensa de la Escuela Pública.

El profesorado considera que la aplicación de la LOMCE en Secundaria y Bachillerato el próximo curso, cuando queda escasamente un mes de la finalización del actual, es inviable. "De llevarse a cabo, el comienzo de curso sería caótico, puesto que la premura y la incertidumbre que la acompaña hacen muy difícil, por no decir imposible, la necesaria planificación y organización de los centros escolares", sostiene.

A su juicio, cuestiones "importantísimas" como la modificación de las plantillas, "ya compleja por la contratación del profesorado interino un día antes del inicio de las clases", hacen imposible la "necesaria planificación, coordinación y concreción de los proyectos curriculares".

Otra cuestión relevante a tener en cuenta, que pone de manifiesto el profesorado del IES Pedro de Luna, es la imposibilidad de llevar a cabo la "necesaria información y formación" de las y los docentes sobre las novedades que la nueva ley trae consigo; "aspectos fundamentales como la consecución estándares y la consiguiente evaluación de los mismos hacen que la formación sea inexcusable (muchos de los problemas detectados en Primaria derivan sin duda de la despreocupación por ofrecer al profesorado una buena formación)". "Lo mismo puede decirse de la información que debe transmitirse a las familias, muchas de las cuales llevan tiempo manifestándose en contra de esta ley", subrayan.

A todo lo anterior, el profesorado suma otros asuntos que también inciden en la buena planificación y desarrollo del inicio del nuevo curso escolar. "El curso pasado ya tuvimos serios problemas con la implantación de la FP Básica; los nuevos espacios que su implantación requería obligaron al centro realizar obras en los espacios existentes, obras que comenzaron un mes más tarde de lo previsto y que no acabaron hasta días después haber comenzado el curso escolar", recuerdan. "Este verano -añaden- es necesario volver a hacer obras en uno de los edificios, el edificio que compartimos con el Conservatorio de Música. Unas obras que conllevan un gasto considerable, pero que no han sido pensadas para dar cabida al elevado número de alumnos que tenemos en las aulas".

En el comunicado, el profesorado advierte que con un gobierno en funciones resulta "improcedente" continuar el proceso de implantación de una ley que rechazan el resto de los partidos hasta el punto de haber adquirido el compromiso de su derogación. "La certeza de la continuidad de la ley es otra de las cuestiones que nos preocupan. El cambio de gobierno coincide con uno de los periodos más complicados en el sector educativo; los meses de junio y julio son los meses en los que se cierran todas las tareas de planificación y coordinación del siguiente curso escolar", por esta razón consideran que "todas las medidas que deben tomarse sobre las cuestiones a las que nos hemos referido son extremadamente urgentes".

De esta forma reclaman a los responsables políticos y administrativos de Aragón y del Estado español una mayor confianza en el trabajo de las y los docentes y un mayor respeto al alumnado y a sus familias; "la calidad en la enseñanza está ligada a ello". "No se puede aceptar que se hable y se presuma de calidad en la enseñanza con unas ratios que hacen imposible la atención a la diversidad del aula, una mínima atención individualizada al alumno, a las familias…; ni siquiera cuestiones como mantener el necesario nivel de disciplina son posibles con esas ratios", aseveran en el texto.

Para el profesorado, el incremento de horas lectivas en el horario de las y los profesores –21 horas en sólo dos territorios del Estado, entre ellos Aragón- incide también en la calidad del trabajo realizado y en cómo éste llega al discente.

"Quizá aumentaría la confianza y el respeto por el trabajo de las y los docentes en la sociedad si los políticos dispusieran medidas que contribuyeran a dignificar un trabajo tan importante para la sociedad en su conjunto, para su presente y para su futuro", apuntan para concluir formulando una pregunta: "¿Sería mucho pedir a los políticos que las medidas a tomar fueran consensuadas e independientes del color político de los gobiernos?".

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