El Partido Popular y su candidato José Luis Martínez-Almeida previsiblemente arrebatarán la alcaldía de Madrid a Manuela Carmena, que ha ganado las elecciones con 19 ediles, pero perdería el Gobierno porque, el PP aún con su peor resultado histórico, 15 concejales, podrán gobernar con el apoyo de los 11 concejales de Ciudadanos y las cuatro actas conseguidas por la extrema derecha de Vox.
En unos comicios donde ha habido más movilización en los feudos de clases altas, tradicionales del PP, que en los barrios obreros, la formación de Pablo Casado se deja seis ediles, pero hincha pecho y en cierto modo salva el pellejo, pues podría recuperar la capital y mantenerse al frente de la Asamblea de Madrid, siempre con el apoyo, asumido ya como rutinario, de la ultraderecha.
Pese a ganar las elecciones, la actual alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, no podrá seguir al frente del Gobierno local. Carmena ha afirmado que éste no era el resultado que querían y ha anunciado que dejará la política cuando se constituya la nueva corporación.
La alcaldesa ha reconocido que los votos a Madrid en Pie, más de 40.000, que sin embargo no han logrado representación al quedar por debajo del 5 %, han podido tener "incidencia" en la perdida de la alcaldía.
Por su parte, la candidata del PP en la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha mostrado segura este lunes de que será la próxima presidenta, aunque ha asegurado que no ha comenzado a negociar todavía con Ciudadanos y Vox.
Después de que las elecciones de este domingo situasen al PP como segunda fuerza en la Comunidad con 30 escaños, pero con opciones de gobernar, Díaz Ayuso ha asegurado sentirse de 10, “pero no me gusta adelantarme a las cosas”, explicaba en la noche electoral al ser preguntada por cómo veía sus posibilidades de gobernar.
Ya de resaca electoral Ayuso afirmaba que “todavía no hemos hablado” con Vox y Ciudadanos, asumiendo que el pacto con la extrema derecha es lo normal afirmaba: "todo lo que nos une será lo que nos haga forjar un Gobierno".
Lo cierto es que la pérdida de la alcaldía de Madrid y el desencuentro de la cúpula de Podemos con la candidatura de Errejón a la Comunidad de Madrid, así como el distanciamiento de las bases con ambas direcciones han generado un clima desagradable en campaña que no parece que vaya a bajar de intensidad en las próximas horas.
Podemos, en la figura de su fundador Juan Carlos Monedero, y los candidatos que acompañan a Íñigo Errejón en Más Madrid continúan culpándose mutuamente este lunes porque Manuela Carmena no haya conseguido revalidar su Gobierno al frente de la Alcaldía de Madrid.
Si anoche Monedero sostenía en Twitter que las cloacas convencieron a Íñigo Errejón para que rompiera Podemos" y a su "ambición" que Carmena haya perdido el Gobierno, este lunes Emilio Delgado, décimo quinto de Errejón, ha culpado a la cúpula del partido morado del fracaso.