El municipio de Binazet (Cinca Meya) "fomenta el maltrato al que se somete a varios pollinos en las fiestas de la localidad, llamando "La Gran Burrada" a la suelta de burros que llevan a cabo, para que centenares de adultos, la mayoría de ellos en estado de embriaguez, intenten subirse sobre ellos como sea", denuncia el Partido Animalista (PACMA) en su página web.
La actividad programada a las 8.00 de la mañana de este próximo domingo, "como colofón de la noche de juerga y alcohol del sábado anterior", es "un reclamo para los que no se han acostado y llevan varias copas encima, buscando con esto una mayor garantía de situaciones 'hilarantes' para los espectadores y participantes". En el programa de fiestas figura incluso como el último festejo del sábado.
Según Mar Rodrigo, Coordinadora de PACMA en Uesca, "la dramática situación que viven los burros no es tomada en consideración en ningún momento ni por los participantes ni por el Ayuntamiento que organiza este espectáculo injustificable a costa del sufrimiento de los animales, donde además de ser físicamente agredidos, se les lanza petardos o botellas".
El Partido Animalista ha contactado con el Ayuntamiento de Binazet para pedir la cancelación de este evento, y que se prohíba su celebración en un futuro. La alcaldesa de Binazet, Matilde Herbera (PAR), "no se plantea la supresión de la Gran Burrada, ni este ni ningún año", lamenta Rodrigo.
"Según ella -continúa-, los animales no son personas ni sujetos de derecho, concepto que en sus propias palabras 'hace que le chirríen los oídos', por lo que no tiene intención de plantear la supresión de esta actividad, claramente denigrante y perjudicial para los burros".
"Con un 'las personas van primero', la alcaldesa evita pronunciarse acerca de si los animales sufren o son maltratados en la actividad, aunque reconoce que a raíz de lo que considera 'amenazas de animalistas' de acudir el año pasado a vigilar el desarrollo del evento, han tomado algunas medidas para que los animales no sean golpeados o heridos", explica Mar Rodrigo.
"Sin embargo, en las fotografías tomadas el 2013, pueden verse dos y hasta tres personas adultas montadas sobre los burros, a lo que responde que 'el burro es un animal de carga", asevra la Coordinadora del PACMA.
