La situación de servidumbre, respecto al uso militar, de una gran parte de la superficie de la capital del país, y de buena parte del resto del territorio, es de sobra conocida por la ciudadanía aragonesa. Pero es importante recordar algunos datos incontestables. Deteniéndonos sólo en las cifras de las mayores instalaciones militares que rodean Zaragoza, nos encontramos con una Base Aérea al sur, con un perímetro de 36km y una superficie de 23 km cuadrados, y en el norte la población esta cercada por el Campo de Tiro de San Gregorio, cuyo perímetro alcanza los 108km y con una extensión de 34.000ha. Y, por supuesto, debemos recordar también el Polígono de Tiro de las Bardenas, en la frontera entre las Cinco Villas y Navarra, con una extensión de 2.200ha.
Para Isabel Lasobras, presidenta de CHA-Cinco Villas, “es espeluznante que durante décadas estemos sometidos al peligro que supone tener un campo de entrenamiento militar en la puerta de nuestras casas, con grandes riesgos para la seguridad de las personas, en referencia al anuncio de nuevas maniobras y "juegos de guerra" en la zona durante esta semana”. Por eso “CHA reclama el desmantelamiento del campo de tiro de las Bardenas y que no se siga tratando a la ciudadanía de la comarca como si fuésemos una maqueta decorativa sobre la que jugar a la guerra”, explica Lasobras.
Desde 1951, el campo de tiro de las Bardenas, el mayor de la OTAN en Europa, está hipotecando el desarrollo económico y social de las Cinco Villas y gran parte de Aragón. Para Isabel Lasobras, “se pone en peligro la seguridad ciudadana. En los más de 60 años de existencia de este polígono ya se han registrado más de 80 accidentes, incendios e impacto medioambiental negativo”. Y añade, “desde CHA se pide que el dinero que se invierte en estos juegos y entrenamientos, y el dinero que se emplea para el mantenimiento de las Bardenas bélicas se use para los servicios públicos y la generación de empleo del conjunto de la ciudadanía. Es inmoral que estén planteando recortes en la sanidad y la educación mientras comprobamos como apenas se reduce el gasto militar”, puntualiza Lasobras. Y concluye, “por otro lado, recordamos que CHA ya defendió una proposición no de Ley en las Cortes de Aragón para reclamar el desmantelamiento de este polígono de tiro y que PP, PSOE y PAR votaron en contra”.
Desde Puyalón de Cuchas-Zaragoza, su portavoz Chesús Royo afirma que “la ciudad de Zaragoza se encuentra sitiada por las instalaciones militares que lastran su desarrollo. El control militar del aeropuerto civil de la capital y el uso de la Base Aérea como “portaaviones” de las fuerzas imperialistas de la OTAN y la USAF en sus guerras genocidas en Africa y Asia, sitúan a Zaragoza como objetivo militar de ejércitos o grupos armados que los aragoneses y aragonesas ni siquiera conocemos”, Royo continúa explicando, “tenemos también el mayor campo de entrenamiento militar de Europa al servicio de la organización criminal OTAN. Todas las vecinas de Zaragoza, Utebo, Zuera y otras ciudades cercanas recordamos lo habitual de “accidentes” que provocan incendios o que acaban con un obús en el jardín de alguna vivienda, si no hay más desgracias personales es por pura casualidad. Y lo mismo ocurre en el caso de las Bardenas, donde la inconsciencia militarista pone en peligro constante a las poblaciones del oeste de Aragón”.
Para Royo, “es ineludible que el Gobierno de Aragón asuma su papel de garante del bienestar de nuestra sociedad, y para ello debería emprender cuantas acciones sean necesarias para expropiar los terrenos de todas estas bases y campos militares, devolver la titularidad de esas tierras al común de las aragonesas, proteger sus hábitats naturales, y poner en marcha planes de desarrollo local que permitan a nuestro país desarrollarse de forma amigable con todos los pueblos del mundo”, y concluye “el internacionalismo por el que trabajamos es la antítesis del militarismo colonial”.
El coordinador de IU en las comarcas de Zaragoza, Álvaro Sánz, critica “la opacidad y peligrosidad de las maniobras en Bardenas, en las que se utilizan misiles aire-tierra guiados por láser. El Ejército del Aire está utilizando el espacio aéreo peninsular como si fuera un tablero de Risk en el que ensayar la guerra, pero con la guerra no se juega”, Sanz continúa su dura crítica afirmando, “a pesar de que el Ejército tiene la frivolidad de llamarles ‘juegos de guerra’, esas pruebas son ensayos generales de operaciones militares que acaban con miles de vidas a diario, son el exponente de la cultura de la guerra frente a la de la solución dialogada y diplomática.No se ha ofrecido información a los vecinos de la zona, que en ocasiones anteriores, como sucedió en 2011 y 2012, ya se vieron sorprendidos con bombazos reales”, ha señalado Sánz, que también ha añadido que “este tipo de ‘juegos de guerra’, suponen un gasto público descomunal e intolerable en estos momentos y conllevan, además, el deterioro medioambiental de un paraje que debiera estar protegido”. Sánz recuerda que “los proyectiles de este tipo de última generación pueden llegar a costar alrededor de 250.000 dólares por unidad”.
Para concluir Sanz afirma que “Izquierda Unida, que forma parte de la Asamblea Antipolígono, históricamente ha venido denunciando la opacidad que rodea a las maniobras militares Sirio-Tormenta 2011 y 2012 realizadas en las Bardenas. En numerosas ocasiones se ha exigido información sobre el coste real de las maniobras sin recibir respuesta alguna, pero continuaremos reclamándolo, a pesar de que el proyecto de Ley de Transparencia planteado por el Gobierno de Rajoy todavía hace más opaco un ámbito que ya de por sí lo era, como es el gasto militar. Es intolerable que se derroche el dinero jugando a la guerra mientras la Educación, la Sanidad, la ley de la Dependencia y otros servicios públicos ven peligrar su calidad”.
