Desde el AMPA Rubén Darío denuncian que el pasado miércoles, 3 de mayo, recibieron numerosas quejas de las familias usuarias del comedor debido a la aparición de insectos en la comida del comedor escolar.
Tras una minuciosa investigación realizada de forma conjunta por el AMPA y la dirección del centro el jueves, 4 de mayo, constataron que efectivamente la empresa Aramark sirvió al menos 30 raciones de comida contaminada al alumnado. “Consideramos grave que al centro llegue comida contaminada, pero es más grave aun que esa contaminación no sea detectada a tiempo por el personal y llegue al plato, tal y como ha sucedido”, denuncian.
“Nos parece intolerable es que por parte del personal de Aramark se niegue la evidencia ante las quejas del alumnado de más edad y se induzca a consumir el producto contaminado”, tal y como sucedió cuando una de las monitoras a lo Manuel Fraga en Palomares, arrebato la bandeja de comida a una niña de cuarto curso y comenzó a comérsela ella diciendo que si la sopa tuviera algo malo ella no se la comería, según han constatado desde el centro.
Una vez comprobados los hechos y recabadas las pruebas necesarias, la dirección del centro y el AMPA el jueves, 4 de mayo, formularon una denuncia escrita ante Salud Pública y se presentó una queja formal ante el Servicio Provincial de Educación. Fruto de la denuncia la inspección sanitaria se personó en el centro el viernes, 5 de mayo, pudiendo constatar que la contaminación no procede del centro educativo.
Este martes, 9 de mayo, la inspección sanitaria se ha vuelto a personar en el centro para volver a inspeccionar la limpieza de la cocina, “que muchas veces deja mucho que desear”, dicen desde el centro, y llevarse las muestras de comida del miércoles, 3 de mayo.
El lunes, 8 de mayo, la directora del CEIP Hispanidad y el presidente del APMA mantuvieron una reunión con el responsable de zona de Aramark , para llegar a un acuerdo que garantice que estos hechos no vuelvan a repetirse, sin tener una respuesta satisfactoria por parte de la empresa, ni siquiera una propuesta de enmienda.
En dicha reunión desde el AMPA y el centro se traslado a Aramark “con toda crudeza lo sucedido”: el mal funcionamiento del servicio de comedor y la falta de organización y control de los alimentos contaminados.
El centro y el AMPA llevan todo el curso remitiendo quejas y denunciando que Aramark no cumple con su obligación de mantenimiento de los electrodomésticos del comedor: uno de los lavavajillas lleva estropeado todo el curso y el otro, apaño tras apaño, sigue sin funcionar correctamente; tal y como confirmó la empresa y constató Sanidad, sigue teniendo piezas que no funcionan.
“Es grave que no se limpien bien los cubiertos pero más grave es que se pongan útiles sucios a disposición de los comensales”, que, recuerdan desde el centro, tienen entre 3 y 12 años, “pero lo que resulta intolerable es que cuando un niño o una niña pide que se le cambie un cubierto con restos de comida del día anterior, el personal de la empresa no lo haga o sea reticente a hacerlo o incluso puede recibir un mala contestación”, quieren denunciar. Esto es "un fallo de organización empresarial intolerable" que les lleva a preguntarse: "¿Lo hará Aramark mejor en los casi 100 comedores escolares que gestiona en Aragón?".