Un equipo de técnicos municipales del Ayuntamiento de Zaragoza participan estos días en el encuentro internacional que se está celebrando en Córdoba de la Asociación Española de Operadores Públicos de Abastecimiento y Saneamiento (AEOPAS).
En este encuentro, previsto en la Empresa Municipal de Aguas de Córdoba (EMACSA) representantes de la Global Water Operator Partnership Alliance (GWOPA), integrada en el programa de Naciones Unidas UN Habitat, analizarán fórmulas para "reforzar la política de responsabilidad social de las empresa públicas de agua".
La incorporación del agua como derecho humano por parte de la ONU pretende que los Estados y organizaciones internacionales proporcionen recursos financieros, capacitación y tecnología necesarios para ayudar a los países a disponer de agua potable y saneamiento saludable, limpio, accesible y asequible para todos.
Es esta la concepción del Gobierno de Zaragoza, entendiendo el agua como un bien común y su acceso como un derecho fundamental. La concejala de Medio Ambiente, Teresa Artigas ha recordado que la voluntad política es la de "conducir la gestión del agua hacia un objetivo de sostenibilidad económica, social y ambiental y distanciarse del peligro de las dinámicas privatizadoras de un bien básico".
En este sentido, la concejala ha dejado claro que "este gobierno siempre buscará la gestión pública al 100 % del recurso, así como potenciar la ciudad dentro de la red estatal de AEOPAS y trabajar con el resto de municipios y organizaciones sociales, ecologistas, académicas sindicales y operadores de agua y saneamiento que persigan los mismos principios de sostenibilidad".
Cabe recordar que el Ayuntamiento de Zaragoza suscribió el Pacto Social por el Agua, que cuenta con el apoyo de más de 300 organizaciones, y que persigue que se definan y acuerden los fundamentos y reglas básicas del modelo público: transparencia, rendición de cuentas y participación social. Además, pretende cumplir tres objetivos generales: frenar la privatización de los servicios en los pueblos, conseguir la sostenibilidad económica, social y ambiental del ciclo del agua e impulsar un modelo transparente y participado.
