Educación aprueba un aula concertada con seis plazas en Borja

El sindicato CGT denuncia que Educación ha mantenido un aula concertada con tan solo seis matrículas a sabiendas de que quedan 12 plazas vacantes en el centro público de la localidad de Borja

Colegio Hermanas de la Caridad de Santa Ana de Borja.

Mientras los dos grupos aprobados para 1º de Infantil en el CEIP Campo de Borja cuentan con 12 vacantes, el colegio concertado de Santa Ana - Hermanas de la Caridad de Santa Ana, de esa misma localidad, ha sido "agraciado" con un grupo a pesar de que únicamente contará con 6 alumnos y alumnas. Esa ha sido la información que el inspector y representante de la administración ha hecho llegar al sindicato CGT durante la Comisión de Garantías celebrada el 17 de junio en esa localidad.

Ni el compromiso del Gobierno aragonés de revertir los recortes del PP en cuanto a horas lectivas del profesorado, ni -en el ámbito local- la promesa realizada por la administración de reabrir el Centro de Formación para Profesores en la comarca vecina de Tarazona, han contado con fondos suficientes. Sin embargo, sí los hay para conceder un aula concertada a un colegio con marcado carácter religioso, a pesar de contar con únicamente con 6 matrículas y quedar 12 vacantes en el centro público.

"Un trato de favor hacia la educación religiosa pagada con fondos públicos que se añade a la petición realizada por algunos sindicatos (con CSIF a la cabeza) de reducir la ratio de los grupos de religión o de asignar al profesorado de dicha materia tareas ajenas a su labor docente para que no pierdan horas lectivas después de que los tribunales avalaran la reducción del horario lectivo de la materia de Religión en Primaria de 90 a 45 minutos", denuncian desde CGT.

Desde el sindicato no quieren pensar, como se ha sugerido durante la reunión de la Comisión, que la administración opte por eliminar un aula del centro público para dársela a la concertada. "Además de un escándalo en lo referido a la supuesta defensa de la escuela púbica por parte del Gobierno aragonés, estarían dando la espalda al tan reiterado argumento que se suele esgrimir en defensa de la escuela concertada, el de la libertad de elección de centro, dado que la población de la localidad ha mostrado claramente su preferencia por el centro público de la localidad". Una libertad que, por otro lado, no se tiene en cuenta a la hora de no conceder grupos de asignaturas minoritarias en centros rurales por no contar con las ratios que la administración considera "rentables".

Desde CGT denuncian, de nuevo, el continuo trato de favor con que cuenta la educación concertada con el consiguiente perjuicio para la escuela pública. Y exigen que esta situación, de mantenerse este nivel de demanda en la escuela concertada de la localidad, lleve pareja decisiones administrativas coherentes con la defensa de la escuela pública y el uso racional de los fondos públicos.

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