El Ministerio Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) decidía el pasado 21 marzo alargar, en dos meses, el plazo para la resolución del Estudio de Impacto Ambiental (EIA), referente al proyecto "Miga Muga", impulsado por la empresa Geoalcali, que pretende explotar las potasas en el subsuelo de la Bal d'Onsella, muy cerca del embalse de Yesa.
La legislación permite ampliar este plazo de cuatro a seis meses en el caso de encontrar razones justificadas. En este caso, el MAGRAMA alega para la ampliación del plazo de resolución, por un lado que Geoalcali, no entregó el estudio sobre las afecciones a la Red Natura hasta el pasado mes de marzo de 2016, cuando deberían haber sido incluidas en el EIA, entregado hace alrededor de un año en el órgano sustantivo, el Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Otra de las razones que aduce el MAGRAMA para ampliar el plazo son las modificaciones sustanciales al mismo, como pueden ser el cambio de la bocamina, con un tamaño aproximado de 25 hectáreas, y para la que la propia empresa trato de solicitar un permiso de investigación, que muy probablemente consistía en la apertura encubierta de la misma.
Además, durante el periodo de exposición pública del expediente, varios organismos y público interesados han manifestado los posibles riesgos que entrañaría la construcción de la mina, asociados a la sismicidad y el impacto sobre las aguas, incluido el embalse de Yesa. A raíz de estas alegaciones Geoalcali elaboró adendas al EIA, que deben ser puestas en conocimiento de dichos organismos y público interesado.