Este miércoles, a las 19.00 horas en la calle Albareda, 6 (Zaragoza), diferentes organizaciones han convocado una concentración ante el domicilio del cónsul Honorario de México en Aragón para denunciar la "inacción" del Gobierno federal ante los ataques paramilitares contra las comunidades indígenas zapatistas. En ella, CGT Aragón, Comité Internacionalista, Comité Óscar Romero y la asociación de solidaridad con Chiapas 'Lumaltik Aragón', entregarán un texto en el que trasladan a Luis Emilio Fernández Ibáñez su "profunda preocupación por los repetidos sucesos de violencia política contra comunidades autónomas zapatistas de Chiapas".
"Como Cónsul Honorario le pedimos que traslade al Gobierno de México, al que representa, los siguientes aspectos: desde hace más de dos años, grupos paramilitares ubicados en el Municipio de Chenalhó, en los Altos de Chiapas, vienen tiroteando, quemando, amenazando y persiguiendo a la población civil, zapatista y no zapatista, del Munición de Aldama. La acción de estos grupos paramilitares nunca ha sido perseguida por el Gobierno federal, municipal ni estatal. Varios muertos y miles de desplazados es el sangriento resultado de su criminal actividad", indica el texto.
"Para agravar más todavía está situación, el pasado 22 de agosto, otro operativo paramilitar, esta vez vinculado a la organización oficialista Organización Regional de Cafeticultores de Ocosingo (ORCAO), atacó con armas de grueso calibre, quemó y saqueó las bodegas de café del Centro de Comercio 'Nuevo Amanecer del Arcoiris', ubicado en el crucero de Cuxuljá, integrado en el Municipio Zapatista Lucio Cabañas. Esta ha sido una agresión más que se suma a la escalada de violencia en la región registrada desde abril del pasado año que vislumbra un plan premeditado de exterminio sobre las comunidades zapatistas", continúa.
Según las organizaciones firmantes del documento, "ORCAO detenta un largo historial paramilitar en la zona, con múltiples agresiones armadas, secuestros, despojos y otros delitos. Nunca han ocultado su estrategia de eliminar a las comunidades zapatistas y hacerse con sus tierras". Las comunidades señalan a los integrantes de esta organización paramilitar como antiguos miembros de Los Chinchulines y otros miembros activos del partido MORENA en el municipio. "Estos vínculos con el partido del gobierno nos despiertan aún mayor preocupación tras los sangrientos antecedentes de la 'guerra sucia' desatada contra las comunidades zapatistas, desde 1994 con los anteriores gobiernos federales y estatales", afirman.
"Dado que el accionar de estos grupos paramilitares continúa impunemente, no podemos menos que deducir la complicidad federal con dichas actividades delictivas. Es manifiestamente conocida la oposición de estas comunidades a grandes megaproyectos gubernamentales y otros proyectos extractivistas de origen trasnacional diseñados sobre su territorio sin su consentimiento, además del rechazo a programas asistencialistas del gobierno que rompen el tejido social y conducen a las comunidades a alinearse a los gobiernos en turno. ¿Es éste pues el origen del incremento de la violencia política hacia ellas?", se preguntan.
Por todo lo anterior, estas organizaciones solicitan al cónsul que transmita su "profunda preocupación al Gobierno federal y le recuerde su inexcusable obligación de intervenir ante la escalada paramilitar contra las comunidades zapatistas, así como encarcelar y poner ante la justicia a sus operadores y responsables intelectuales".
