Reas Aragón presenta hoy, 5 de junio de 2013, la tercera de las charlas programadas en las XVIII Jornadas de Economía Solidaria de Aragón que se celebran en el espacio Joaquín Roncal, en la calle San Braulio. Esta será la última de las charlas programadas en las XVIII Jornadas de Economía Solidaria de Aragón, y bajo el epígrafe “De la Renta Mínima de Inserción a la Renta Básica de las Iguales”, Manuel Sáez comenzará exponiendo la arquitectura esencial del concepto de Renta Básica de las Iguales, la historiografía del término, sus notables diferencias conceptuales y éticas con las denominadas Rentas Mínimas de Inserción o la enorme capacidad de esta propuesta, RBIs, para generar espacios de igualdad y justicia social, al menos en términos económicos.
Por su parte, María Fidalgo, repasará el planteamiento de la propuesta de RBIs incidiendo en que esta se basa en el rechazo al 'dogma' -una vez más pretendemos cuestionarlo todo para poder construir un mundo sin prejuicios- que establece el concepto de 'trabajo asalariado' como único eje posible de pertenencia social, como principio que articula y regula el derecho de las personas a la existencia. Y sobre todo, nos deslumbrará con sus explicaciones acerca de la 'facilidad y viabilidad' de las políticas necesarias para implementar RBIs en comunidades humanas concretas. Sus ejemplos de implementación para Galiza nos harán comprender que el concepto de RBIs es aplicable a este país, a Aragón o cualquier otro país donde su ciudadanía así lo acuerde colectiva y soberanamente.
Reas Aragón pretende con esta charla “motivar el debate en el conjunto de la sociedad aragonesa. Queremos invitar a todo el mundo a seguir soñando modelos socioeconómicos posibles basados en la democracia directa y el desarrollo comunitario, de avanzar en propuestas de trabajo cooperativo que ya existen, de practicar de nuevo la solidaridad”, explica Javier Ortega, de la comisión de prensa de las jornadas.
“Proponemos a la sociedad que abra los ojos y contemple las propuestas que están surgiendo con un espíritu renovado, basadas en el trabajo que se viene haciendo desde antes de la crisis por personas silenciosas que buscan otros modelos de organización económica de nuestras sociedades. Alternativas al modelo económico capitalista, que suponen nuevas formas de pensar y actuar, de ser y compartir, de saber y hacer. Sostenemos argumentada y racionalmente que de entre los sistemas económicos conocidos el capitalismo es uno de los menos democráticos, menos eficaces, menos justos, menos viables y menos participativos. Confirmamos desde el análisis y la evaluación practica que no solo es posible, sino imprescindible, cambiar el sistema económico capitalista por otro modelo que permita el desarrollo igualitario, individual y colectivo, de la sociedad, donde el acuerdo libre evite la imposición y la explotación del ser humano. Y afirmamos con prudencia, pero también con urgencia, que ese cambio de sistema depende de nosotras y que ponerlo en practica es un compromiso irrenunciable para nosotras”, señala Ortega.
Manuel Sáez explica que “la RBIs es el derecho que tiene cada ciudadano o ciudadana a recibir unos ingresos periódicos, que aseguren la cobertura de sus necesidades materiales, independientemente de cómo sea su situación dentro de la esfera productiva. Por el hecho de nacer, cada una de las personas tiene reconocido el derecho ciudadano a la RBis”.
“Las características estructurales que definen la RBIs son: Individual: Se concede a cada persona de forma exclusiva. Universal: Con una doble exigencia, es para todas las personas y no es contributiva. Incondicional: Con otro doble requisito, es independiente del nivel de ingresos y sin ningún tipo de relación con el mercado de trabajo asalariado. Y también contiene unas características aun más concretas que son: Cantidad: Como mínimo, la cantidad a percibir como RBis será igual a la definida como 'Umbral de Pobreza' -en nuestro caso- será equivalente al 50% de la renta per cápita, tal como lo define la UE. Equidad: Cada persona recibirá exactamente la misma cantidad de RBis. Participación: La RBis se dividirá en dos partes: Una parte será dada “en mano” a cada persona y la otra estará dedicada a las inversiones públicas: educación, sanidad, vivienda, transporte, medio ambiente, proyectos de carácter colectivo, microeconomía social, etc. Refundición: La RBis sustituirá a prácticamente todas las otras prestaciones económicas. Desde la base social: Se plantea vinculada a la movilización y participación directa de la ciudadanía”, detalla Sáez.
Por su parte María Fidalgo explica que “la condición para conseguir esta situación de poder decidir como persona consiste, según el planteamiento de la RBis, en el reconocimiento de un ingreso suficiente, con la forma de un derecho universal e incondicional, hecho por el cual se reduce la dependencia, la obligación del trabajo asalariado y la imposición del mercado de trabajo como mecanismo de redistribución de la renta y, por extensión, del derecho a una vida en condiciones dignas”.
“La RBis propone una situación en la cual el ciudadano o ciudadan dispone de una nueva dimensión de la responsabilidad individual, entendida desde la libertad y no desde su cruda necesidad condicionada por los intereses de la economía y sus ciclos. Parte la Rbis de la justicia no contributiva; supone la contrapartida del derecho de los ciudadanos y ciudadanas a los recursos naturales, el conocimiento histórico colectivo y la aplicación de su capacidad creativa de trabajo, todos estos factores productivos apropiados y controlados, ahora mismo, privadamente por los empresarios”, detalla Fidalgo.
