Convocan una concentración en Zaragoza por la libertad de la capitana Carola Rackete

La capitana del Sea Watch 3, un barco humanitario con 40 personas migrantes rescatadas a bordo, fue detenida por las autoridades italianas tras desembarcar en Lampedusa debido al "estado de necesidad". Se enfrenta a una elevadísima multa y varios años de prisión por ello.

Carola Rackete

La Federación Aragonesa de Solidaridad, la Plataforma Ciudadana contra el Racismo y Zaragoza Acoge -  Bienvenidos Refugiados, han convocado para este martes 2 de julio una concentración en protesta por la detención de Carola Rackete por parte de las autoridades italianas. La protesta tendrá lugar en la Plaza de España de Zaragoza a las 20 horas.

Carola Rackete es la capitana del Sea Watch 3, un barco humanitario que en la madrugada del sábado decidió entrar en el puerto de la ciudad italiana de Lampedusa. El barco no tenía autorización, pero tomaron la decisión de entrar invocando el estado de necesidad para poder desembarcar a las 40 personas migrantes que habían rescatado en el mar de una muerte más que probable. Nada más atracar en el puerto, Carola fue arrestada acusada de "resistencia o violencia contra un buque de guerra", delito que en Italia está penado con entre 3 y 10 años de prisión.

Según informan medios de comunicación italianos, un barco de la Guardia italiana intentó impedir por la fuerza que entrara en puerto, sin importar a las autoridades italianas el estado en el que se encontraban las personas a bordo y en un auténtico alarde de insensibilidad. Carola, según parece, esquivó el bloqueo y consiguió su objetivo, que no era otro que desembarcar a estas personas debido al estado de necesidad: llevaban más de 17 días, desde el 12 de junio, en la mar sin que las autoridades italianas hubieran respondido positivamente a los requerimientos de ayuda por parte del barco.

Hay que señalar que la capitana actuó cumpliendo 'la ley del mar' y los tratados de auxilio internacional, legalidad de mayor rango que la esgrimida por Salvini, es decir, la capitana actuó obligada por los tratados internacionales que, cabe recordarlo, Italia también tiene rubricados.

El equipo jurídico que defiende a Carola ha afirmado que "fue una elección desesperada". Previamente al atraque de emergencia por parte del Sea Watch 3, Carola afirmaba en un vídeo difundido en internet y redes sociales que afrontaría todo "con el apoyo de nuestros abogados. Ahora solo quiero que las personas puedan bajar a tierra". Carola habló del mal estado físico y psicológico de los 40 migrantes que estaban a bordo después de que fueran evacuados por motivos médicos un joven aquejado de fuertes dolores abdominales, y su hermano de 11 años que le acompañaba.

Las organizaciones y colectivos convocantes de esta concentración, bajo el lema “Salvar vidas no es delito”, reivindican, entre otras cosas, la libertad para las personas detenidas -también sufrieron arrestos el resto de la tripulación- y el cumplimiento de la legalidad internacional y los derechos humanos de las personas en movimiento y del derecho de rescate en el mar.

Oleada de solidaridad e inicio de campañas por la libertad de Carola

Nada más conocerse la noticia, comenzaron a desarrollarse movimientos para pedir la inmediata liberación de la capitana y campañas en su apoyo. Desde firmas en plataformas digitales hasta recaudación de fondos. En Alemania, una iniciativa ha conseguido ya recaudar centenares de miles de euros para sufragar los gastos legales de la activista. Otra campaña, iniciada por la ONG Sea Watch en una conocida red social, lleva un balance parecido que la anterior.

En redes sociales y páginas de recogidas de firmas, los apoyos se cuentan por centenares de miles y los "hangstad" sobre Carola son trending topic.

FreeCarola

El racista y xenófobo Salvini celebra la detención de la capitana

El Gobierno italiano, por su parte, se excusaba por la denegación de auxilio, alegando que no iba a autorizar el desembarco mientras no obtuviera un acuerdo con otros países europeos para acoger a las personas migrantes rescatadas a bordo. Un auténtico mercadeo con la vida de estas personas que, precisamente, se echan a la mar huyendo de una probable muerte en sus países de origen.

El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, celebró la detención de Carola. En una alocución grabada con su móvil en modo "selfie", se mostró satisfecho porque se cumplieron sus peticiones de arresto de Carola Rackete, la incautación del barco y la reubicación de los migrantes en países de la Unión Europea. Una actitud que más bien recuerda a la de un dictador que a la de un mandatario de un país civilizado y respetuoso con los derechos humanos más básicos, como lo es el derecho a la vida.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de nuestra política de cookies, pincha el enlace para más información.

ACEPTAR
Aviso de cookies