Comienzan las obras de construcción del embalse de Almudébar pese a su escasa efectividad

La obra ya tiene este mes de enero como fecha de inicio, pero como ya ha ocurrido con otras grandes obras hidráulicas podría tener un parón, pues la Audiencia Nacional admitió este verano un recurso denunciando irregularidades en el proceso y la inviabilidad económica y ambiental del proyecto

Replanteo de las obras del embalse de Almudébar.

El Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), a través de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), ha iniciado las obras para la construcción del embalse de Almudébar, que requerirán una inversión de 102.204.834 euros. 

Esta semana han comenzado los trabajos topográficos y, en fechas próximas, se iniciará el acondicionamiento de los accesos. De esta forma se pone en marcha la construcción de esta infraestructura requerida por Riegos del Alto Aragón, que genera grandes incógnitas en cuanto a su utilidad. 

El embalse tendrá una capacidad para almacenar 169,71 hectómetros cúbicos de agua, que saldrían de los caudales procedentes del Galligo que superen la capacidad del embalse de La Sotonera y los excedentes de la regulación del Cinca.

Pero, el embalse de La Sotonera hace varios años que no se llena, de hecho mantiene un paulatino descenso en la cantidad de agua embalsada, a día de hoy, en pleno invierno, está al 50%, frente a datos del 62% en la misma semana de 2008. En cuanto al Cinca la propia CHE emitía un informe en el que advertía que los tramos medio y bajos estaban "sometidos a la fuerte regulación de los diferentes embalses", asegurando que "las grandes infraestructuras de regadío, industrias e explotaciones hidroeléctricas comprometen el mantenimiento de un caudal circulante en algunos puntos en estiaje", probablemente en la época de mayor necesidad por parte de Riegos del Alto Aragón.

Los cálculos más optimistas, presentados por la CHE, hablan de que a pleno funcionamiento la garantía de suministro del sistema pasaría del 70% al 77,8% para Riegos del Alto Aragón, sin embargo estos estudios no tienen en cuenta las restricciones económicas, espaciales y temporales del llenado del embalse de Almudébar. 

Además, cada llenado del embalse de Almudébar “costaría 2,5 millones de euros netos en electricidad, contando los ingresos por turbinado, pues el llenado se efectuaría íntegramente mediante bombas eléctricas, con una altura nominal de bombeo de 46 metros”, según un informe de Ecologistas en Acción. 

La obra ya tiene este mes de enero como fecha de inicio, pero como ya ha ocurrido con otras grandes obras hidráulicas podría tener un parón. De hecho Ecologistas en Acción interpuso un recurso en la Audiencia Nacional denunciando irregularidades en el proceso y la inviabilidad económica y ambiental del proyecto, que fue admitido a trámite el 17 de julio de 2017.

La obra afectará a los términos municipales de Uesca, Vicién, Almudébar, Tardienta y Sangarrén, todos ellos en la Comarca de A Plana de Uesca, e incluye dos presas (diques) de materiales sueltos que cerrarán una amplia vaguada natural cercana al municipio de Almudébar, la construcción de una estación de bombeo, una subestación eléctrica y la reposición de los caminos afectados.

El embalse de Almudébar forma parte del proyecto Biscarrués-Almudébar, de hecho es el hermano menor de la obra que se pretende en la Galliguera, una obra que arrastra más de 30 años de retraso debido y con un contrastado impacto negativo social y económico para la zona. 

 

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de nuestra política de cookies, pincha el enlace para más información.

ACEPTAR
Aviso de cookies