Colombia se divide en su segunda vuelta electoral entre la derecha de Duque y la izquierda de Petro

El candidato Iván Duque ha conseguido en la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Colombia un 39% de los votos, mientras en segundo lugar se encuentra Gustavo Petro con un 25%. La FARC retiró su candidatura a la presidencia tras denunciar la falta de garantías electorales y el constante asesinato de sus líderes sociales.

Foto: Noticias Caracol

La primera vuelta de las elecciones de Colombia celebrada este domingo ha otorgado al candidato conservador Iván Duque del Partido Centro Democrático un 39,14% de los votos. Le sigue el izquierdista Gustavo Petro del Movimiento Colombia Humana con un 25,09% con el que disputará la segunda vuelta de la presidencia.

La cuestión que más divide a los dos candidatos y que más preocupa a la población es el mantenimiento del acuerdo de paz alcanzado entre el gobierno de Juan Manuel Santos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Iván Duque a pesar de que ha asegurado que “no hará trizas” el acuerdo, sí ha adelantado que espera hacer modificaciones importantes “para que no afecten el Estado de Derecho” y ha advertido de que “la Colombia de la paz es la Colombia donde la paz se encuentra con la justicia, donde hay verdad, hay reparación y hay cumplimiento de penas”.

Asimismo, el líder de su partido, Álvaro Uribe se ha presentado siempre como el mayor opositor público del tratado de paz.

Por su parte, Gustavo Petro ya ha declarado en numerosas ocasiones que se muestra como el garante del desarme de la guerrilla y del mantenimiento del acuerdo. En su discurso también defendió sus planes de inclusión social para los sectores más desfavorecidos y ha negado tener la intención de lleva a cabo expropiaciones de tierras.

Petro aseguró que su rival ya ha alcanzado su “techo” de votantes, por lo que espera que su candidatura sea la más beneficiada y añadió que en estas elecciones el voto “no se polarizó”, sino que se distribuyó entre varias alternativas muy fuertes lo cual indica, para el candidato, que “Colombia va cogiendo fuerza y legitimidad lo que durante mucho tiempo no se podía hacer: el pluralismo como eje de la democracia".

En tercer lugar y muy cerca de Petro se encuentra el profesor universitario Sergio Fajardo de Compromiso Ciudadano con el 23,73% de los votos. Por lo tanto, la segunda vuelta electoral queda en manos de los más de cuatro millones de votantes que apoyaron a Fajardo y que ahora tendrán que decidirse entre la derecha de Duque o la izquierda de Petro.

Pese a que Fajardo comparte algunas de las premisas de Petro como el mantenimiento de los acuerdos de Paz, no anunció ningún apoyo a ninguno de los dos candidatos. En su discurso, felicitó a los dos candidatos y remarcó que “no podemos permitir que la violencia vuelva a marcar la vida”.

La FARC denuncia la falta de garantías electorales

Estas han sido las primeras elecciones presidenciales tras el acuerdo de paz y la aparición del nuevo partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC). Sin embargo, este nuevo partido decidió retirar su candidatura tras denunciar la falta de garantías electorales y el constante asesinato de sus líderes sociales.

Aunque no abandonó las elecciones, Gustavo Petro también denunció que “el software presenta alteraciones de algoritmos que no dan garantía y que pueden generar un fraude masivo”. En cuanto al apoyo internacional, aseguró que la Unión Europea solo envió a dos personas para que garantizaran la legalidad de las elecciones.

Al margen de los problemas informáticos, la excandidata a la vicepresidencia por la FARC, Imelda Daza, aseguró en una entevista para Telesur que tanto ella como el candidato para la presidencia del partido Rodrigo Londoño, alias Timochenko, recibieron agresiones verbales y físicas que les “obligó a desistir de ese propósito”.

"Hay grupos criminales que generan convulsión sobre todo en las zonas periféricas del país. Sin descanso son asesinados líderes populares, cívicos étnicos y afrodescendientes. Es una violencia que no ha sido atendida debidamente y por lo tanto se prolonga", y añade que hasta la fecha hay 41 personas asesinadas que no han recibido justicia.

Junto a ello, se encuentra el acuerdo de paz que para Daza cuenta con “enemigos de la paz dispuestos a sabotear el proceso” y recuerda que pese a que su partido tenía derecho a subsidios como todos los partidos, el Consejo Nacional Electoral Colombiano congeló a principio de mayo los recursos que iban destinados a la campaña de la FARC.

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