El Ayuntamiento de Zaragoza ha iniciado una defensa de su postura respecto de la prohibición de las hogueras de San Juan (del solsticio de verano en Torrero), basada en tres argumentos. Dos de ellos son mentira y el tercero es un acto de cobardía política. Los argumentos son estos.
Decir que ha habido comunicación con las asociaciones
Falso. El Ayuntamiento, no se ha puesto en contacto con las asociaciones salvo para denegar las solicitudes presentadas y pedirles algo imposible (buscar alternativas que no existen) para las hogueras. No ha respondido en absoluto a sus demandas porque ni siquiera las conoce y esto es debido a que no ha recibido a las asociaciones del barrio, nunca, jamás, ni por teléfono, ni fax, ni por escrito, tam tam, señales de humo, nada, cero. El silencio de la concejala de servicios públicos Natalia Chueca, significa una clara dejación de funciones y una enorme falta de respeto a las vecinas y vecinos de nuestro barrio. Seguimos esperando, tres meses ya señora Chueca.
Decir que nos han planteado alternativas
Falso. El Ayuntamiento de Zaragoza no nos ha ofrecido alternativa alguna. Ir a Parque Venecia no es una alternativa, es un síntoma de no conocer qué es ser barrio y qué suponen las tradiciones populares. Grave problema este. Da miedo.
Que su postura es respetar lo que digan los informes técnicos
Cobardía política de libro. Los bomberos hacen su trabajo, gran trabajo, muy profesional y necesario. El Ayuntamiento, no. El acondicionamiento del parque de la Paz para las hogueras es fácil y la señora Chueca no lo hace o no lo quiere hacer. En cambio, se escuda en los profesionales para tapar su dificultad de diálogo y su dejadez en los barrios. En el mismo momento en que el parque esté adecuado (tarea pendiente para la concejala Chueca), no me cabrá la menor duda de que los bomberos seguirán haciendo su excepcional trabajo y Torrero tendrá su hoguera.
Repito, apoyo total a los bomberos, velan por nuestra seguridad. Señora Chueca, haga su trabajo y no se escude en estos excepcionales profesionales para tapar sus errores.
Por todo ello, quiero denunciar en estas líneas esta inusitada actitud del Ayuntamiento de Zaragoza frente a las asociaciones históricas del barrio de Torrero. No se puede tolerar esta sinrazón. No todo vale y menos ante las vecinas y vecinos que altruistamente hacen un gran esfuerzo por mantener las tradiciones. Merecen apoyo y reconocimiento y de ninguna manera este maltrato por parte del ayuntamiento de Zaragoza presidido por el alcalde Azcón. No todo vale para arrimar el ascua a su sardina.
Las vecinas y vecinos de Zaragoza, ni somos vándalos ni irresponsables. Queremos seguridad en la celebración de nuestras tradiciones. Lo que no podemos tolerar es ni la mentira ni la cobardía de un Ayuntamiento que no hace lo que tiene que hacer. Escuchar a las y los ciudadanos y apoyarlos en lo que necesiten.
Pónganse las pilas y dejen de enredar.