Para la Confederación General del Trabajo (CGT) el hecho de vestir a la Virgen del Pilar con el manto de la Falange el día anterior al aniversario de la muerte de José Antonio Primo de Rivera, "lejos de ser un error es una muestra más de la convivencia de parte de la Iglesia Católica con el fascismo".
Desde este sindicato recuerdan que no es la primera vez, y que anteriormente fue la División Azul la que vistió a la Virgen con su manto fascista.
Consideran un "insulto" y una "falta de respeto a la ciudadanía" el hecho de que el Cabildo Metropolitano de Zaragoza pidiese perdón y afirmase que se trataba de un “error”, porque no es "un hecho aislado, es un hecho que se repite demasiado a menudo".
CGT asegura que este acto, al igual que el de usar el manto de la División Azul, incurre en "enaltecimiento del franquismo y del fascismo", y vulnera la recién aprobada Ley de Memoria Democrática de Aragón, motivos por los que entienden que se debería sancionar al Cabildo. "La Iglesia no puede estar por encima de la Ley", concluyen en su comunicado.