Aborto: Interrupción y finalización prematura del embarazo. En un sentido más amplio puede referirse al fracaso por interrupción o malogramiento de cualquier proceso o actividad.
Ley: Norma o precepto de obligado cumplimiento que una autoridad establece para obligar, prohibir o regular una cosa, generalmente en consonancia con la justicia y la ética.
¿Qué justicia y ética valoran los hombres que hacen esta ley? ¿Quiénes son los hombres que se han dado el poder para llevar adelante semejante ley?
Las mujeres españolas estamos perplejas, ¿dónde queda todo el trabajo avanzado en derechos y libertades? ¿A qué nivel sitúa a las mujeres españolas, y con ellas a toda nuestra sociedad, la última prepotencia del partido popular?
Aborto para una mujer significa que su cuerpo y su mente tienen que elegir para seguir sobreviviendo, significa la oportunidad de continuar con dignidad e incluso plantearse una maternidad posterior, o no, dependiendo de sus circunstancias, hay tantos motivos por los que el aborto debe contemplarse como una solución, como los hay para dejar que las propias mujeres decidan lo que deben hacer.
¿Qué justicia, ética y moral es válida para dejar a las mujeres sin la opción de elegir?
¿Qué está en juego para que los hombres decidan sobre la maternidad?
Traemos ciudadanas al mundo, pero queremos que se encuentren en un entorno deseado, ¿tal vez esto no interesa? ¿Quiénes son las personas contrarias al aborto?
Pro-vida somos todas las mujeres y todo ser humano que se precie, pero la cuestión es el precio, ¿es más barato adoptar niños de familias a los que por no poder hacer frente a sus gastos o formación, se los tienen que quitar? ¿es mejor tener mano de obra infantil de familias que necesitan para comer de los brazos de sus hijos? ¿es moral hacer parir, aunque no quieran, a las mujeres, porque es un beneficio para los poderosos?
El poder y la vida no deben de tener nada en común, porque la vida se puede entender perfectamente sin el poder, pero el poder necesita vidas, vidas baratas, a bajo coste para perpetrarse, para que lo obedezcan.
Al poder, no le va la insumisión y mucho menos las mujeres insumisas, las que se rebelan, las madres solteras orgullosas que rompen los estereotipos, las lesbianas que deciden ser madres y se muestran, las mujeres pobres que dicen basta y deciden abortar, las mujeres que sufren y deciden qué hacer con su cuerpo.
Este tipo de poder, el que quiere sometimiento, tiene los días contados.
Somos imparables las mujeres con decisión, valentía y conciencia sobre nuestra reproducción, somos multitud y no reconocemos el poder de otros sobre nuestros cuerpos.
¿Por qué en vez de hacer esta Ley, no se proponen educar a niños y niñas en igualdad para que ninguna mujer tenga la necesidad de abortar?
¿Por qué no dedican sus esfuerzos en cosas más constructivas que eliminen la precariedad y la pobreza?
Todas las personas maduras hemos escuchado y sabemos de mujeres muy cercanas que han abortado, lo mal que lo han pasado, los motivos, siempre buenos, el calvario por el que pasan las mujeres que han tomado esta decisión y las vidas que ha costado efectuar abortos en lugares no aptos, clandestinos y con métodos no saludables, no los vamos a enumerar ahora, pero estamos seguras de que la historia da para una gran enciclopedia de los horrores.
¿Qué ley? ¿qué poder? ¿qué moral es la que permite que sus mujeres no tengan poder de decisión sobre sus propios cuerpos?
Esta propuesta del Partido Popular debe revocarse, impedirse, pararla, es nociva para la salud de nuestro país.
Cristina Beltrán Mayoral, Presidenta de Amasol -Asociación de Madres Solas- y miembra de la Asamblea Feminista de Zaragoza | Para AraInfo
