Hace 80 años, el 1 de abril, las tropas de Franquistas entraban en Almacelles. Fueron días de persecuciones y represión. Apresaron a varios ciudadanos y ciudadanas por motivos ideológicos y políticos. 16 vecinos y 4 vecinas, una de ellas embarazada, de Almacelles y Gimenells. Alguno de ellos, cuando su pareja les llevaba comida donde los tenían detenidos, comentaba “creo que pronto nos van a soltar, no hemos hecho nada” refiriéndose a que no tenían causas pendientes con la justicia.
Fue al atardecer del día 20 de abril de 1938 cuando los y las trasladaron, supuestamente a la prisión de Balbastro, pero a la salida de Binéfar, los vehículos se detuvieron e hicieron bajar a los y las 21 presas. Allí mismo había una gran fosa, al lado de una cuneta, y “allí les llegó la muerte por el pelotón de ejecución, sin juicio, a la sombra del ocaso, sin saber la causa de su crimen para recibir tan duro castigo. Murieron por ser republicanos, por sus ideas, por defender la democracia, la paz y la libertad. Ese fue su único crimen. Todos murieron, a excepción de uno que se salvó quedando sepultado por un compañero”, aseguran desde el Ateneo Republicano de Binéfar.
Años más tarde, concretamente el 2 de marzo de 1958, un Jesuita con algunos y algunas familiares de los y las republicanas muertas se dirigieron en el lugar de la ejecución y exhumaron los cuerpos, reconociéndolos por las pertenencias personales, recogieron los restos y los trasladaron a un nicho, propiedad del Monje Jesuita, en el cementerio de Almacelles. Desde el 1958 aquel nicho permanece con la única inscripción de la fecha de la exhumación.
El sábado, 14 de abril, a las 16.00 horas en el cementerio de Almacelles, ante el nicho nº 717, el Ateneo Republicano de Binéfar y Comarca, con la participación de las familias y la colaboración del Ayuntamiento de Almacelles, “haremos un homenaje merecido a los republicanos allí enterrados y a sus familias, descubriendo una lápida con todos los nombres de los que yacen en dicho nicho”, explican.
El mismo día a las 13.00 horas, en Binéfar, a la salida de la población dirección a Monzón, al lado del almacén de Electricidad Palacín, en el monolito que en su día se erigió, en el lugar donde fueron fusilados muchos de los republicanos de la comarca, harán un homenaje y entrega floral.
“Con este acto pretendemos ayudar a cerrar las heridas que aún siguen abiertas, ya cada vez más se alzan las voces de hijos e hijas, nietos y nietas y biznietos y biznietas de los represaliados en nuestra sociedad” y añaden, “entre todos debemos hacer un acto de reflexión y de praxis para cerrar estas heridas, con el fin de poder avanzar hacia un estado democrático real, de todos y para todos”.