Sólo el 3,3% de las calles de Teruel llevan nombre de mujer: el 0,77% sin contar a las religiosas

Espacio Municipalista ha registrado una solicitud a la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Teruel para introducir algunos nombres como el de María Pérez Lacruz, Concepción Arenal, María Zambrano, Emilia Pardo Bazán, María Andresa Casamayor, María Domínguez, María Rosario Lucas Pellicer, Carmen Valero, Montserrat Martínez, Encarna Pastor o Purificación Atrián

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Teruel.

Espacio Municipalista ha registrado una solicitud a la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Teruel por la que demandan que se incorporen una serie de nombres de mujer en el callejero de la ciudad.

En 2019 el alumnado de Historia y Cultura de Aragón del IES Francés de Aranda presentó un informe a la alcaldesa Emma Buj, dentro de la iniciativa #merezcounacalle, por la que se buscaban luchar por la igualdad entre hombres y mujeres, persiguiendo el objetivo de alcanzar la igualdad en el callejero de la ciudad.

El estudio, que analiza los nombres de las calles de la capital, arroja unos datos demoledores, a juicio de Espacio Municipalista, puesto que los datos reflejados señalan que de las 781 calles de la ciudad, 151 llevan nombre de hombre y tan solo 26 de mujer, lo que supone un 3,3% frente al 19,9% con nombre de hombre. Además, si se analizan más a fondo los nombres de mujer existentes, vemos como gran parte de ellos corresponden con religiosas, reduciendo a tan solo un 0,77% los nombres dedicados a mujeres.

Desde el gabinete de Emma Buj anunciaron que las nuevas calles llevarían nombre de mujer “hasta llegar a la igualdad real”, pero la realidad es que poco se ha hecho desde entonces. “Se han urbanizado y creado nuevos viales, pero sigue siendo testimonial el uso de nombres de mujer para su denominación”, señala el concejal de la formación Zésar Corella.

Para Zésar Corella “se ha hecho poco en materia de igualdad entre hombres y mujeres a nivel urbanístico”, y es por ello que proponen “acelerar el proceso” en materia de denominaciones de viales.

¿Qué calles de Teruel cambiarían?

Proponen para ello una serie de nombres de mujeres “relevantes” para contar con una calle en Teruel. Personas ilustres dignas del reconocimiento que otorga la dedicación de una calle.

La formación municipalista quiere que, al objeto de dar visibilidad a tantas mujeres que han contribuido al desarrollo de la sociedad en que vivimos, se acorten los plazos para conseguir el objetivo de “alcanzar la igualdad en los nombres de hombre y mujer en el callejero de la ciudad”.

La propuesta consiste en que las calles con una similar denominación en las que unas de otras se diferencian por un añadido alfabético, calles con nombres repetidos que dificultan su identificación, viales con la misma denominación agrupados por letras o calles con idéntica denominación, sean objeto de modificación nominal y sean dedicadas a mujeres. ha sido presentada a la Junta de Gobierno Local por ser el órgano competente para iniciar el trámite y busca aprovechar el callejero de la ciudad.

Purificación Atrián Jordán (1929-2021)

Entre los nombres planteados se encuentran Purificación Atrián Jordán pionera de la arqueología en el Estado español y secretaria general y vicedirectora del Instituto de Estudios Turolenses, así como directora de su Servicio de Arqueología, germen del Museo Provincial de Teruel, que dirigió entre 1959 y 1990, además de ser responsable de su fundación.

Encarna Pastor (1930-2020)

Dinamizadora del movimiento jotero en Teruel, formó parte de grupos folclóricos de la ciudad convirtiéndose en un referente. La Academia de las Artes del Folclore y la Jota de Aragón la nombró académica de honor.

Montserrat Martínez González (1946-presente)

Nacida en Castellote. Doctora en Historia y maestra, ocupó numerosas responsabilidades en el Campus de Teruel como la de Decana de su Facultad de Ciencias Sociales y Humanas. Mas por encima de todos ellos, resalta su labor como profesora y la estrecha relación mantenida con el medio educativo rural turolense. Directora del Instituto de Estudios Turolenses.

Carmen Valero (1955-presente)

Atleta nacida en Castelserás. Especialista en pruebas de cross fue dos veces consecutivas campeona del mundo de campo a través, y la primera atleta del Estado español en competir en los Juegos Olímpicos en Montreal 1976.

María Rosario Lucas Pellicer (1937-2004)

Pese a las dificultades de la época realizó sus estudios en la Universidad Complutense de Madrid, fue becada por el Instituto Español de Prehistoria del CSIC y participó entre 1958 y 1962 en excavaciones de yacimientos turolenses. En 1991 obtuvo la Cátedra de Prehistoria, llegando a dirigir el Departamento de Prehistoria y Arqueología. Charo Lucas mantuvo una fuerte vinculación con Teruel y su Monreal del Campo natal.

María Domínguez (1882-1936)

Periodista, poetisa y política. Primera alcaldesa elegida por sufragio popular en el Estado español en 1932. Republicana socialista y firme defensora de la educación universal tanto para hombres como para mujeres. De origen humilde y campesino su formación fue autodidacta. Durante su corto mandato creó bolsas de trabajo rural para reducir el desempleo y construyó una escuela unitaria de niños y niñas. Se dedicó a la docencia y el periodismo, como colaboradora asidua en el Ideal de Aragón y articulista en Vida Nueva, desde donde defendía el papel activo de la mujer, defendía la democracia y los valores republicanos, así como denunciaba las injusticias y la promoción de la cultura como motor de cambio. Fusilada en 1936 por las topas franquistas y olvidada hasta mediados de la década de los 90.

María Andresa Casamayor (1720-1780)

Matemática y escritora. Nacida en el seno de una familia acomodada de comerciantes textiles, destacó en áreas que en aquella época excluían a las mujeres y dominaban los hombres, como el manejo de los números y en la aritmética. Ejerció de maestra de niñas, siendo una mujer pionera y adelantada a su tiempo, y la única científica del Estado español del S. XVIII de la cual se conserva su obra plasmada en su trabajo ‘Tyrocinio Arithmetico. Instrucción de las quatro reglas llanas’, el primer manual científico publicado por una mujer en castellano.

Emilia Pardo Bazán (1851-1921)

Noble y novelista, periodista, ensayista, crítica literaria, poetisa, dramaturga, traductora, editora, catedrática y conferenciante gallega introductora del naturismo en el Estado español. Fue una precursora acerca de los derechos de las mujeres y el feminismo. Reivindicó la instrucción de mujeres como algo fundamental y dedicó una parte importante de su actuación pública a defenderlo. Entre su obra literaria destaca la novela Los Pazos de Ulloa (1886).

María Zambrano (1904-1991)

Intelectual, filósofa y ensallista que basó su obra en el compromiso cívico y el pensamiento poético, siendo reconocida con el Premio Príncipe de Asturias en 1981 y el Premio Cervantes en 1988. Comprometida con la libertad del intelectual alcanzó un puesto de excepción entre la intelectualidad poética estatal y en 1935 comenzó su tarea de profesora de filosofía en el Instituto Cervantes. Se exilió al término de la Guerra Civil, regresando a Madrid en 1984 casi medio siglo después.

Concepción Arenal (1820-1893)

Pensadora del catolicismo social, experta en derecho, poeta, periodista y autora dramática encuadrada en el realismo literario. Esta mujer de ideas liberales y progresistas fue pionera en el feminismo y precursora del Trabajo Social en España. Con 21 años se disfrazó de hombre para poder acceder a la Facultad de Derecho y tras ser descubierta sometida a un examen, que al superarlo le permitió continuar. En 1872 fundó una sociedad dedicada a la construcción de casas baratas para familias obreras, denunció a lo largo de su vida la situación de las cárceles, la mendicidad y la miseria en las casas de salud. También dedicó esfuerzos a combatir las condición de la mujer en el S. XIX, en la línea de las sufragistas.

María Pérez Lacruz (1917-1942)

Turolense conocida con el sobrenombre de María la Jabalina, por el origen de su familia de la zona de Jabaloyas. Al inicio de la guerra civil se incorporó como enfermera a la Columna de Hierro, participando en la creación de un hospital en Sarrión. Resultó herida en Puerto Escardón, tras la Batalla de Teruel. Una vez recuperada tras meses de hospitalización permaneció en la retaguardia trabajando en la siderurgia.

Finalizada la guerra fue detenida y encarcelada sin ninguna acusación. Después se le atribuyeron cargos y algunas autoridades emitieron informes incriminatorios, incluso un vecino la acusó de la quema de la iglesia. Otro detenido republicano declaró que había participado en el asalto a la cárcel de Castellón y la muerte de varios guardias de la misma. También en la muerte del cónsul de Bolivia en Valencia y en el asesinato de ocho sacerdotes y un diputado. Dirigentes falangistas señalaron que “no ha participado en desmanes”.

Nunca hubo cónsul de Bolivia en Valencia y el director del Hospital Provincial de Valencia donde estuvo ingresada certificó que, durante esos crímenes, ella se encontraba hospitalizada. En 1942 es condenada sin pruebas por un delito de “adhesión a la rebelión”, siendo la última mujer fusilada por el franquismo a sus 25 años de edad. No llegó a ver a su bebé, nacido en 1940, del que nada más se supo.

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