Esta no es una carta para los Reyes Magos. No pedimos regalos, reclamamos un Ayuntamiento de Uesca que actúe democráticamente, con ecuanimidad y con justicia.
Pronto llegarán las elecciones y quienes gobiernan esta ciudad, y quienes les apoyan, necesitan contar lo que han hecho aunque estas cosas tengan que ver con problemas no resueltos en nuestra ciudad como es el caso de la participación, el patrimonio natural o material, la movilidad, la sostenibilidad, el descontento del personal municipal o la vivienda, la poca capacidad de generar empleo, de despertar apego e ilusión, por citar algunos.
A lo largo de estos años, esta ciudad y quienes aquí vivimos hemos padecido el desprecio y judicialización de todo lo que tiene que ver con nuestro patrimonio o nuestra memoria. ¿A qué tienen miedo, a qué intereses responde esta actitud que lleva a Uesca poco a poco a perder su identidad, que la hace anodina, huérfana, sin historia?
La infancia y la juventud están olvidadas, eternamente supeditadas en el tiempo a planes o diagnósticos, sin entender que la participación es algo más que convocar a cien personas previo pago para proponer cosas. La participación no va de esto, va de reunirse y trabajar junto a las organizaciones vecinales o sociales de esta ciudad, aunque no piensen lo mismo.
Necesitamos una ciudad y gobernantes que apoyen de verdad a su personal municipal, incluido el cuerpo de bomberos y bomberas que recientemente ha tenido que salir a las calles para explicar a la ciudadanía sus dificultades y a quienes desde alcaldía se les prohibió salir en la cabalgata de Reyes para luego desdecirse.
¿Qué pasara ahora con la gestión de los fondos europeos en el Ayuntamiento? ¿Habrán planificado esta cuestión no? ¿Este trabajo recaerá sobre el mismo personal municipal? Cualquier crítica o movilización en nuestra ciudad es siempre entendida como una afrenta personal. ¡Qué falta de sentido democrático!
En el nuevo año seguiremos trabajando en la sociedad civil, en las plataformas, en las diferentes organizaciones de nuestra ciudad, para que la participación ciudadana sea plena, democrática, creativa, intergeneracional y que dé frutos y soluciones al bien común de la ciudad.
Necesitamos una ciudad que avance en muchas direcciones, en cuestiones como que el presente sea rico en oportunidades laborales, estudiantiles, culturales, que defienda los derechos de las personas que vienen de lejos, que apoye la lucha feminista y LGTBI, que apoye dar cumplimiento al derecho a la vivienda, que apoye con medidas concretas y visibles la lucha contra el cambio climático, que se ocupe de la juventud, de la infancia, de las personas mayores, con más presupuesto. Sabemos que estas peticiones no se van a cumplir por arte de magia. Habrá que trabajar.
Las personas que formamos Cambiar Huesca somos reconocidas en nuestro territorio: mujeres y hombres en quienes confiar y deseamos de corazón que los presupuestos aprobados para el año 2023 en nuestra ciudad sean los últimos presupuestos que este partido “socialista” saca adelante con el apoyo de la derecha, algo que dice ya mucho de una forma de gobernar mantenida desde hace años.
Allí estaremos con nuestro programa político de confluencia con las voces y el hacer de una izquierda necesaria. Nuestros mejores deseos para todas las personas que aquí residen.
