Ante las últimas declaraciones del Tribunal Supremo desde este Ateneo (ARZ) queremos manifestar nuestra indignación y rechazo a las declaraciones del alto tribunal en su auto en que paraliza (otra vez) la exhumación y traslado de los restos del militar golpista, dictador y genocida Francisco Franco, al tiempo que exigimos su rectificación pública.
Y manifestamos:
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Que consideramos un insulto y un agravio a todos los demócratas el reconocimiento que ese tribunal hace del dictador como “Jefe de Estado desde el 1 de octubre de 1936”
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Que, como ha reconocido el propio tribunal al mantenerse en su opinión, lo anterior no se debe a ningún error o patinazo accidental.
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Que esa frivolidad y falsedad hace flaco favor a la ya desprestigiada justicia española, que se alía con los planteamientos del nazi-fascismo internacional.
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Que el interés y el deber de la Justicia en España debería, debe estar enfocado en la reparación de las víctimas del franquismo, en la aplicación con urgencia de la Ley de Memoria Histórica -como así se estableció por la representación ciudadana-, y en el trabajo por su propia dignificación.
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Que no se puede entender la actuación de ese tribunal más que desde la óptica ideológica más ultra y no desde la neutralidad y legalidad que se le exige.
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Que todo lo anterior (y más) nos lleva de nuevo a poner en tela de juicio la propia democracia en España, uno de cuyos poderes fundamentales es la Administración de Justicia.
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Y que, por tanto, nos reafirmamos una vez más en la necesidad de ruptura con el régimen del 78 y en la apertura de un Proceso Constituyente que nos lleve a liquidar todos los vestigios del franquismo, a la reparación de las víctimas y a una auténtica Democracia.
Para lo cual, hacemos un llamamiento a todas las fuerzas progresistas a manifestar también su indignación y apoyo a la apertura de este proceso.
