Ciudadanos, el elefante que faltaba en la cacharrería

Cientos de militantes que abandonan, pucherazos y políticos paracaidistas puestos a dedo, o extrañamente electos, son críticas que comienzan ser la tónica en las diferentes primarias C’s.

Este martes me despertaba sobresaltado desde el punto de la mañana. Aunque parezca mentira el mundo sigue siendo capaz de sorprenderme todas las semanas. En ésta, de mitad de abril, tocaba que la formación política liderada por Albert Rivera fuera capaz de subirme las pulsaciones y mantenerme boquiabierto por unos minutos.

Una fuente, que es amiga y le creo, me comentaba algo que no podía comprender. Insinuaba que las primarias de Ciudadanos en Aragón estaban amañadas, y me hablaba del lugar del amaño, la hora e incluso de alguno de los partícipes en la confección fraudulenta. Yo, le hacía entrar en razón, y le decía que aunque así fuera, no teníamos pruebas y no se podía publicar.

La verdad es que fui desarrollando inquietud esa mañana, y por la tarde escribí un artículo sobre el caso. Investigué un poquito y pude ver la cantidad de gente nueva que hay en Ciudadanos, pero sobre todo la cantidad de ciudadanos que abandonan la formación naranja. La misma cantidad casi, que políticos de otras formaciones que las abandonan para subirse al barco que capitanea Rivera.

Me hizo pensar un poco en la cuestión. Yo, poco perspicaz, pensaba en que Ciudadanos era un partido de descontentos, de gente que consideraba que este sistema está muy podrido pero sigue siendo bueno. Vamos, que abogan por cambiar el contenido, pero no el continente. Joder, de nuevo me equivocaba. Soy un inocente.

Conforme hurgaba por redes sociales y diarios me daba cuenta que las palabras “Ciudadanos” y “pucherazo” cada vez aparecían en más ocasiones juntas. Mariano Gasparet escribía en El Mundo: “Ciudadanos Madrid corre riesgo de morir de éxito. Su ascenso en los sondeos es proporcional al malestar de las bases por el modo en que se ha vulnerado la voluntad de los militantes en agrupaciones tan importantes como las de Getafe y Móstoles”. El titular de esa información: “Impugnación y pucherazo en Ciudadanos”.

Continuaba leyendo y encontraba más de lo mismo en otros lares. En Murcia al menos 23 militantes de Ciudadanos dimitían en bloque por sospechas en la misma dirección. En Móstoles, San Sebastián de los Reyes, la federación madrileña, León… Al día siguiente de la publicación del artículo incluso recibí la felicitación telefónica de un ex Ciudadano de Aragón.

Menudo lío. ¿No? Pucherazo es una acusación que va más allá del paracaidismo que está sufriendo el partido de Albert Rivera. PP, UPyD, PSOE y partidos regionalistas, como el PAR son el caladero en el que pesca el barco de Ciudadanos. Viejos conocidos de la política en el nuevo partido de la regeneración democrática. Paracaidismo y pucherazos. Lo dicho, un lío.

Existe un lugar y unas actuaciones, que resumen en cierto modo, la llegada de Ciudadanos a las diferentes ciudades y territorios del Estado español. San Sebastián de los Reyes.

Empecemos por el principio. Los Estatutos del partido obligan a estar afiliado para poder presentarse como candidato, al menos seis meses antes. No es el caso de Miguel Ángel Martín Perdiguero, elegido ayer como candidato a la alcaldía de San Sebastián de los Reyes, que fue cesado como edil del Partido Popular, hace tan solo una semana.

La elección de Martín Perdiguero, ex ciclista y ex concursante del reality ese de la isla, ha provocado la airada crítica de las bases de un partido que llevaban meses trabajando en el proyecto. Algo natural ¿no? Consideran que se trata de una imposición que no “respeta la democracia interna ni la transparencia”. Sobre todo, cuando eres tú quien ha estado tirando del pelotón.

¿Cómo se podía conocer que Martín Perdiguero era alcaldable por Ciudadanos hace una semana si todavía era el concejal de deportes por el PP? Por un lado porque el proceso de primarias del partido naranja no elige la cabeza de lista, que es señalada con un dedo, y permite el voto solo de los siguientes candidatos. Aunque estas votaciones también han creado suspicacias.

Ya hablábamos hace tres días que algo parecido había ocurrido con los candidatos en Aragón, en este caso procedentes del PAR, números dos y tres de la lista al Ayuntamiento. Salían del PAR hace menos de seis meses y eran elegidos por primarias. Pues bien, en Aragón no crea tanta polémica, ni siquiera sale en los papeles, que se limitaron a presentarnos a los candidatos y candidatas. Pero, hay un gran número de personas que militaron en Ciudadanos ciertamente descontentas.

Mal se lo está montando Ciudadanos en su asalto a las instituciones fuera de Catalunya. Candidatos saltimbanquis que lo mismo militan en PP que C’s, con ejemplo mayúsculo en la candidata a la Junta de Extremadura, Victoria Domínguez, ex edil del PP, ex candidata del PSOE, que incluso llegó a formar su propio partido, Unión del Pueblo Extremeño, ahora es la abanderada de la renovación, el paño que le saca el brillo a la vieja política, bajo la bandera naranja de Ciudadanos.

Cientos de militantes que abandonan, pucherazos y políticos paracaidistas puestos a dedo, o extrañamente electos, son críticas que comienzan ser la tónica en las diferentes primarias C’s.

Algo así me contaban el martes por la mañana que había pasado en Aragón, y boquiabierto trataba de analizar, de entender las dudas de quién me lo contaba acerca de las primarias. Me contaba algo de una cena, donde se habría hecho el “recuento” de votos.

Vamos, como un elefante en la cacharrería de la vieja política.

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