Txapela, chándal de Astore y autotune. Una reinterpretación de los versos de Xabier Lete y trap. Pero encajarles dentro de este último género sonaría reduccionista. Rap, reggaetón, dub… Y una buena dosis de macarreo imbricada en la realidad social que comparte esa parte de la generación de finales de los 90 que reivindica de dónde viene: “Cuando era txiki en mi barrio se quemaban villavesas donde ahora hay casas de apuestas”. Esto es Chill Mafia Records, una cuadrilla procedente de las periferias de Iruña, que con la publicación de su mixtape ‘Ezorregatik x berpizkundea’ -febrero, 2021-, han refrescado los altavoces de Euskal Herria … Y de otros muchos puntos del Estado. Este sábado se estrenaron en Zaragoza, en el Centro Cívico de L’Almozara. Charramos con Kiliki Frexco, una de las voces del colectivo.
¿Quiénes son los Chill Mafia?
Una cuadrilla de unos 12 chavales muy majos de la periferia de Iruña, que nos dividimos el trabajo. FlakoFonki, Irene Cervantes y yo -Kiliki Frexco- a las voces, Sara Goxua como DJ, Tuli Tump y Suneo como productores… Cada uno nos encargamos de algo.
¿Qué vincula a los miembros de la cuadrilla?
Nos conocimos en una Sound System hace dos o tres años… Somos de Iruña, pero cada uno venimos de un barrio: dos o tres de Mendillorri, Rotxapea, Ansoain, Villava…
¿Cuál es vuestro proceso creativo?
Nos solemos juntar 15 personas en un cuarto, a sudar, a echar birras, probando y escuchando música… Eso sí, somos mazo perfeccionistas, las cosas hay que hacerlas siempre con mimo.
Lanzasteis el álbum ‘Ezorregatik x berpizkundea’ en febrero. Desde entonces habéis pasado por varias salas y festivales de Euskal Herria agotando entradas. Esta semana habéis estrenado ‘Barkhatu’, que lleva más de 100.000 visitas en YouTube.. ¿Cuál creéis que es el motivo por el que engancháis al público?
Eso de petarlo se divide en un tercio de porcentaje de curro, otro tanto de picardía y, obviamente, suerte. Hemos pillado el momento, la gente tendría ganas de escuchar algo nuevo y de fiesta.
Trap, regaeton, rap, autotune… y referencias a la tradición musical vasca. ¿Qué influencias musicales tenéis?
En general, a todos nos gusta de todo. Cunde beber de todo un poco. Por ejemplo, yo considero que vivo en una esquizofrenia musical constante, puedo flipar con lo bueno que es Manu Chao, escuchar a Silvio Rodríguez y gozar escuchando a Siete Balas.
¿Qué hay de punki en vosotras?
Es que Iruña es muy punki. Las cosas como son, escupir está muy guapo y los tiempos están… como para no ser un poco punki.
Acerca del título de la mixtape, en castellano: “De nada x el renacimiento”, ¿Tiene un doble sentido?
El titulo es un poco flipadica. En mi opinión, la escena musical vasca de los últimos 15 años ha sido durísima, las mismas canciones con mensaje en todos los sitios. Y, si el titulo es una gracia, para estar más a gusto… Como un venga, va, ¡de nada!
En vuestro último tema mencionas que pusiste a bailar a Fermin Muguruza con ‘31014’ ¿Lo imagináis bailando trap ?
Vino a nuestro bolo en la sala Dabadaba de Donosti justo después de que le hiciera un beef en Twitter y desde el escenario parecía que se lo estaba pasando muy bien. Bailó y se la gozó. Estuvimos hablando luego y la verdad que es muy majo y me pareció muy buena persona.
¿Qué piensas del público que critica el reggaeton/trap/ perreo?
Creo que es algo muy común dentro de toda esta gente que se cree una fiera. Para mí, es una pereza odiar un género porque sí… ¿Por qué le vas a poner puertas al mar? Puede que esto de criticar sea cosa de puretas y cuando pienso en esto siempre me acuerdo de una entrevista de Skroto (cantante de Tijuana in Blue) en la que decía que “la juventud tiene más razón que el copón”.
En vuestras letras tratáis temas como el “volver a casa de los padres si no hubiera trabajo”, hasta de las drogas como ocio y de la vuelta a casa después de estar de fiesta ¿Mezclar el macarreo con lo político engancha?
Creo que el macarreo siempre es una respuesta acertada. A fin de cuentas es nuestra realidad, estamos hablando de cosas que le pasan a cualquiera de nuestra generación. Y, es que el mensaje político explícito ya está muy trillado. Tampoco hace falta robarle barras a Lenin para ser político. No tienes que construir un panfleto con tu música, eso ya lo hizo él. Hablamos de nuestra realidad, de nuestro barrio, que por cierto estoy muy enamorado de toda su gente… Que en los barrios pijos no es tan buena la gente.
¿Os está funcionando combinar el euskera con el castellano?
Desde luego, no nos está cerrando ninguna puerta. En Iruña muy poca gente vive completamente en euskera. Nuestras letras son un reflejo de cómo hablamos, porque siempre metemos alguna palabra en castellano.
¿Con quién os gustaría que os comparasen ?
Si nos comparasen con alguien, a mi me gustaría bastante que lo hicieran con los Tijuana in blue, que es un grupo que siempre me ha gustado porque tenían otra forma de decir las cosas. Hace poco nos pusieron un comentario diciendo que éramos los nuevos Eskorbuto pero eran mucho más macarras… Nosotros somos unos majos.
¿Os asusta que esto sea un boom pasajero?
Sí que me lo he planteado… Pero bueno, mientras dure habrá que disfrutarlo y, si no, cuando tenga 40 años diré qué bien me lo pasé.
¿Algo más que añadir?
Un besico para mi amatxi.