Aumentan las protestas ante una posible ampliación de licencia ambiental de la empresa Distiller SA en Ólvega

Tarazona y otras localidades de la Comarca Soriana de Tierras del Moncayo, a la espera de una respuesta por parte de la Consejo Medioambiental de la Junta de Castilla y León, ante las alegaciones presentadas contra la ampliación de licencia ambiental solicitada por la empresa Distiller SA

Distiller
Concentración contra Distiller. Foto: Mario Sánchez Lahuerta.

La Serranía Celtibérica afronta la despoblación como uno de sus principales males y corre el peligro de que cualquier proyecto pueda ser visto como una solución. El pueblo soriano de Noviercas fue un ejemplo hace algunos años de cómo el capital extranjero puede conseguir el apoyo en el territorio para un proyecto al que sindicatos, organizaciones ecologistas y partidos políticos y gran parte de la población, se oponen por sus consecuencias. Éste fue desestimado por asociaciones medioambientales tildándolo de insostenible desde un punto de vista medioambiental y social y, a su vez, fue impulsado por la cooperativa navarra Valle de Odieta, en colaboración directa con el empresario Emiliano Revilla.

Emiliano Revilla propietario del “Grupo Revilla” ofreció promesas en su día como la agilización de trámites o subvenciones públicas; y en prensa, a través de argumentos como la repoblación (que ya vienen resonando con otros casos como con la mina de Borobia) o instando “a todos los vecinos y propietarios de terrenos de Noviercas que, por encima de intereses personales, se haga prevalecer el interés general y el bien común y se materialicen lo antes posible los acuerdos pendientes en relación a la compra venta de los terrenos”, según afirmaciones recogidas en El Salto.

Hoy, el por suerte, intento fallido de crear un “Eurovegas de la leche” se encuentra paralizado debido a motivaciones económicas de sus inversores, pero los pueblos de la comarca del Moncayo, en Soria, afrontan nuevos retos. Esta vez, la empresa es Distiller S.A., la cual presentó hace algunos meses una solicitud a la Conserjería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León para una ampliación de sus instalaciones y que a su vez, fue puesta en información pública. Esta ampliación, supondría una modificación sustancial de la licencia ambiental de la que poseen actualmente y consistiría en el incremento del 25% de su capacidad de procesar residuos, pasando de 60.000 t/año a 75.000 t/año, y en implantar un nuevo tratamiento consistente en la combustión o incineración de disolventes y colas residuales y tóxicas. Éste es un procedimiento altamente peligroso cuando se tratan este tipo de residuos formados por compuestos orgánicos volátiles que darán lugar a hidrocarburos aromáticos policíclicos e incluso a dioxinas si hay presencia de cloro, algo que es posible por cuanto esta empresa trata compuestos organoclorados.

Distiller S.A. es una empresa dedicada al tratamiento y gestión de residuos industriales, así como en la valorización de disolventes y tratamiento de aguas. Su planta instalada en el polígono industrial de la localidad soriana de Ólvega, ha traído varios conflictos entre los habitantes de las localidades cercanas, asociaciones como Ecologistas en Acción de Soria y representantes políticos de las localidades. Todo ello sin haber valorado que Distiller SA y otras empresas están vertiendo presuntamente desde antes de 2011.

Según lo expuesto en las alegaciones para la negativa de esta ampliación presentadas por Miguel Alonso, alcalde de la localidad de Cueva de Ágreda, en 2012 la fábrica provocó un vertido, que contaminó más de 6 km del arroyo los Caños. En Junio del 2015 y en septiembre del 2016 varios vecinos y vecinas tuvieron que ser atendidas por problemas respiratorios, nauseas e irritaciones. El 2016 los bomberos de Ólvega acuden a sofocar un incendio de origen desconocido de 15 bidones, que ni los y las empleadas conocían su contenido, por lo que no saben cómo actuar, y ante la incertidumbre optan por rebajar su temperatura poniendo sus vidas en riesgo. En 2017 vuelve a darse otro suceso similar.

Parecidas circunstancias rodean el comportamiento en la acería Rugui Steel SL desde 2007 o la quesería Saiona 2017, nos cuenta Miguel Alonso, “que en principio se quiso instalar en Tudela y que tiene un importante vertido de sueros, espumas y fuertes olores. Esta empresa está llamada a abastecerse del proyecto de la producción de la vaquería”, nombrado al principio de este artículo y finalmente, no llevado a cabo en Noviercas.

Observando los datos recogidos en los escritos presentados como alegaciones y con datos extraídos de la Junta de Riego; en la parte alta del Moncayo en los últimos 80 años se ha registrado una pérdida de más del 70 % de agua, por lo que, tras un cambio de información con los pueblos alrededor del Moncayo, "hemos de tener claro que es un bien escaso que está disminuyendo por motivo de la evolución del planeta", asegura en sus alegaciones Miguel Alonso. Por tanto, urgen medidas encaminadas a conservar la parte alta del mismo así como empezar a pensar, cómo se va limpiar y descontaminar el pantano del Val, el cual las recoge para darle el uso con que se proyectó, que no era otro que el de “agua de boca”.

Distiller
Concentración contra Distiller. Foto: Mario Sánchez Lahuerta.

El pantano de El Val, que recoge junto al Moncayo aguas del Queiles y del río que le da nombre, lleva camino de convertirse en un vertedero de residuos humanos y ganaderos y, también, en costosa metáfora de la planificación y la gestión de las obras hidráulicas en Aragón, dada la falta de usos para los más de 25.000 millones de litros que puede almacenar, lo cual hace que el agua apenas se renueve y que, como consecuencia de ello, los caudales con restos de depuradoras, granjas y cultivos estén deteriorando su equilibrio ambiental.

El Val recibe aportación excesiva de fósforo de tres fuentes: la depuradora de la localidad soriana de Ágreda (40 %), a la que se suman otras aguas residuales del mismo pueblo y de Ólvega, la actividad ganadera e industrial (38 %) que se desarrolla aguas arriba de la captación que llena el embalse y el funcionamiento de la piscifactoría de Vozmediano (21 %). Este pantano es de gran importancia para Aragón ya que abastece de agua a la comarca de Tarazona y el Moncayo.

La concejala de Medio Ambiente de la localidad de Tarazona se ha unido a la causa, y ha presentado las correspondientes alegaciones, las cuales “están centradas en el abuso del agua y los vertidos, porque van al río Val y éste, es el que abastece el embalse del Val y lo contaminan. La Confederación Hidrográfica del Ebro reconoce los altos niveles de contaminación y ahora sí que están empezando a hacer cosas y a tomar medidas, pero yo les reprocho que esas medidas llegan tarde y se quedan cortas” comentaba a AraInfo. Ana Rita, concejala de Tarazona resalta que “en Tarazona, lo que más nos afecta y lo que más recalqué en las alegaciones fue el aumento del uso del agua y el aumento de los vertidos al agua. Los acuíferos de los que se aprovechan en Castilla y León, pueden mermar”.

Y es que estas empresas necesitan mucha agua, la cual obtienen con diferentes perforaciones sobre los acuíferos. “Creemos que no es de recibo que ningún grupo social o empresarial se permita argumentar una falsa falta de agua para extraer los recursos de pueblos más pequeños o del propio acuífero que también es un patrimonio de toda la población. Ninguna administración debería aceptar presiones de ningún tipo con este fin y además, debería ser muy concienzuda en la valoración y análisis del funcionamiento de unas empresas cuya instalación en Ólvega, solo responden a un interés particular y que han llegado hasta este municipio ante la falta de voluntad de otros”, recalcaba Miguel a AraInfo “y no olvidemos que Ólvega vierte diariamente a la depuradora de Ágreda mas 3.000.000 de litros”.

Por otra parte, el año 2017 fue un año con una sequía muy intensa y municipios de la zona como Cueva de Ágreda y Beratón, prácticamente se quedaron sin agua y escasamente se regaron los huertos. El total del resto del agua se empleó íntegramente en el abastecimiento municipal. Pero el municipio de Ólvega siguió abasteciendo a las empresas y al municipio sin ningún tipo de restricción (piscinas públicas y privadas, riego de calles, jardines, lavaderos, riego de los abundantes huertos anexos a las casas).

“Quedó claro en este período que la verdadera necesidad de Ólvega de agua, no era la de asegurar el abastecimiento, sino la de diluir la brutal contaminación de fábricas como Distiller, Saiona, Ruguí, Cyndea-Pharma, etc. Estas empresas, junto al resto del municipio vierten en la EDAR de Ágreda que, al no estar preparada para estos productos, bloquean sus sistemas y mandan todos estos lodos contaminantes al Cañón y Pantano del Val donde se depositan produciendo la eutrofización del embalse e impidiendo el uso de sus aguas”, nos comenta Miguel y añade consternado que “es de dominio público que algunas empresas cuando tienen sus tanques llenos de residuos, algunos altamente tóxicos, al llegar la noche, principalmente en fines de semana y fiestas, los sueltan hacia el Cañón y pantano del Val”.

AraInfo también ha contactado con Mario Sánchez, uno de los fundadores del grupo Podemos de Ólvega, el cual nos ha relatado que el 31 de agosto de 2020 se efectuó una reunión entre uno de los directivos de Distiller SA y los y las concejalas del Ayuntamiento de Ólvega, para explicarles de qué iba a ir el tema de la ampliación y resolver cualquier duda y pregunta que tuvieran. Ante la negativa de que la ciudadanía participara en esta reunión, y la negativa ante esta ampliación, Mario y demás habitantes de la localidad acudieron a las puertas de la empresa con pancartas y máscaras en señal de protesta. Así nos lo relataba: “Quisiera aclarar que tanto la recogida de firmas que se hizo para las alegaciones y la concentración, es por iniciativa vecinal. No hay partidos de por medio, decidimos hacerlo así para que no se politizara, ya que no es un problema político, sino que es un problema de salud pública”. Y continuaba: “Fuimos con pancartas protestando por la contaminación que han producido al Val y los gases que están emitiendo, ya que hay informes de altas concentraciones de tolueno y sileno y de benceno (derivados del petróleo). Ya sabemos cómo va el funcionamiento de esta empresa, que llevan 9 años de pleitos con Ecologistas en acción de Soria. En Ólvega el ayuntamiento anterior y éste actual, no han informado debidamente a los vecinos desde el principio. Cuando comencé en la fundación del grupo de Podemos de Ólvega, hicimos un informe sobre la andadura de esta empresa porque ya nos preocupaba”.

Los y las habitantes de Ólvega se ven afectadas por intereses similares y además, los sufren mucho más directamente. La contaminación atmosférica ya ha dado problemas respiratorios a más de un vecino y vecina, además del inminente riesgo de explosión o de incendio. “Hay unas quejas en el 2015 que se resolvieron, porque hubo gente con náuseas y que respiraban mal. Mandaron una estación móvil de medición del aire y llamaba la atención las altas concentraciones de estos gases, y les pusieron una multa mínima de 20.000 € aproximadamente. Les hicieron tomar ciertas medidas, las cuales 2 años después fueron a comprobar por Ecologistas en Acción de Soria y no habían sido ejecutadas aún”. Nos explicaba Mario resignado. “Un concejal de Podemos le preguntó al directivo en la reunión porqué los vertidos llevan 10 años realizándose, como reflejan los informes, y le contestó que era porque la construcción estaba mal hecha y entonces esto qué quiere decir, ¿qué van a seguir igual porque la construcción está mal hecha? Esto lo pagaremos a largo plazo, toda la comarca y sostenible no es. Es una de las mayores industrias de residuos de España, pero a qué precio, lo pagan mis padres y mis amigos y es un problema. En 10 años no se ha protestado nunca dado que no ha habido mucha información. Y tampoco crean muchos puestos de trabajo dado que esta planta trabajan 15 operarios con sueldos de 800€”.

Estas protestas han comenzado a surgir efecto, y han dado lugar a la creación de plataformas de apoyo, como la reciente creación de la Plataforma en defensa del agua del Moncayo entre ciudadanos, ciudadanas y formaciones políticas diversas, o la solicitud de la Declaración de Parque Natural del Moncayo en esta zona, para preservar la conservación y el respeto de su uso. “Estamos situados en una zona de influencia LIC y ZEPA de la Sierra del Moncayo, dentro de la Red Natura 2000. El día 23 de junio de 2020 se reunieron los alcaldes de Agreda, Vozmediano, Cueva de Agreda y Beratón solicitando a la Conserjería de Medio Ambiente, de la Junta de Castilla y León, la declaración de Parque Natural del Moncayo de los pueblos Sorianos (como ya lo tiene Aragón hace muchos años)”, nos contaba Miguel. “De esta manera, al ser zona LIC o ZEPA, de protección de aves y de animales, zona restringida, no te dejan cortar una zarza o coger tierra. Así se cuidaría y respetaría más y estos grupos o empresas, dejarían de mandar residuos de forma tan impune como la están mandando”.

Hasta el 3 de agosto de 2020 este proyecto estaba en período de alegaciones y ahora la Junta de Castilla y León, tiene que decidir y deliberar sobre si concede o no la ampliación de esta planta que legitimaría un deterioro de estos territorios.

“Tenemos una dehesa muy bonita de 700 ha, con árboles centenarios con truchas autóctonas que no se deberían perder. Pero los pueblos de Soria como los de Aragón, cada vez van a menos, y no se preocupan de los pueblos porque de ahí no sacan votos. ¿Qué vamos a hacer ahora en Castilla y León?, ¿es lo único que piensan hacer?, ¿meter purines y cuádrigas? El poco turismo que tenemos lo pasamos a Ágreda, a Laguna Negra, a Soria... Los políticos están reaccionando pero muy poco y a Ólvega no se le podía permitir lo que están permitiendo con las empresas que tienen”, me responde Miguel con gran resignación. Y también advierte que “Aragón está recibiendo de forma directa o indirecta toda la porquería y están aumentando las granjas, en alta proporción. Tenemos un problema muy complejo y toda esta mierda que echamos a este terreno kárstico, todo lo filtra y lo lleva a Aragón. Aragón debe poner límites a la CHE. Desde hace 70 u 80 años hemos perdido el 70% del agua y si les siguen dejando pinchar a Ólvega, el agua se la roban a Aragón”.

Ante la pregunta acerca de la competencia por parte de las administraciones tanto aragonesas como castellano leonenses, el combativo alcalde de Cuevas responde apenado que todo lo que le queda por hacer ante la lucha por la conservación de su querido territorio es esperar las alegaciones e intervenir mediante los partidos políticos.

A cierre de esta edición, AraInfo ha intentado ponerse en contacto con la empresa Distiller SA pero no ha obtenido respuesta ni declaración alguna.

“Si la población abandona hoy nuestros pueblos, por la ineficacia de los gobernantes, siempre quedará las praderas, el monte, los ríos y la tierra de regadío... Para cuando otros decidan volver a dar vida a estos paisajes”, declara Miguel en nombre de los habitantes de la comarca en sus alegaciones.

Nosotros y nosotras nos quedamos con esa bonita esperanza.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de nuestra política de cookies, pincha el enlace para más información.

ACEPTAR
Aviso de cookies