Reconozco haberme perdido en la pregunta de Philip K. Dick sobre si sueñan los androides con ovejas eléctricas, es innegable el atractivo de un futuro donde los avances tecnológicos hagan factibles los replicantes, aunque convenientemente olvidemos que ese mundo proviene de un desastre apocalíptico. Igualmente supongo que es sencillo sentirse ilusionado por proyectos con aura y sabor futurista como el Hyperloop o el vertipuerto (aeropuerto para drones de reparto), e incluso a aquellos que tienen un cierto complejo de ser de provincias lo del WiZinkCentrer les parecerá una modernidad maravillosa, obviando que contamos en la ciudad con espacios suficientes para …
