Por una mayoría arrolladora el pueblo de Irlanda ha votado a favor de eliminar algunas de las leyes antiaborto más restrictivas del mundo, que prohibían el derecho a la mujer a decidir libremente sobre su cuerpo. "Parece que hemos hecho historia”, ha apuntado el primer ministro irlandés, Leo Varadkar para añadir que Irlanda tendrá "una constitución moderna para un país moderno", un país "un poco más amable, un poco más tolerante y un poco más moral". "Las que habían sido silenciadas han exigido ser oídas, hemos roto decisivamente con el pasado", ha subrayado la presidenta de Sinn Féin, Mary Lou McDonald.