La inmunidad colectiva se consigue cuando entre el 60% y el 70% de la población presente anticuerpos, por lo que está protegida ante una infección y actúa como barrera al impedir que el virus alcance a aquellas personas que todavía podrían contagiarse. Así se desprende, de los resultados provisionales de la primera de las tres fases del estudio estatal de seroprevalencia.
