En las últimas semanas la pandemia ha desatado las actitudes xenófobas contra las personas trabajadoras del campo. A la quema de asentamientos de jornaleros u otros ataques directos se suman bulos y comentarios del tipo “los focos son por inmigrantes” o “nos traen las enfermedades” que más allá de su carácter racista no recogen la evidencia.
