Organizaciones políticas, sindicatos y entidades ciudadanas han presentado, en rueda de prensa celebrada este viernes en la FABZ, el Recurso Contencioso-Administrativo interpuesto contra el Acuerdo del Ayuntamiento Pleno de Zaragoza, de 17 de julio de 2020, en que se adoptó aprobar con carácter definitivo la modificación aislada núm. 175 del Plan General de Ordenación Urbana de Zaragoza vigente, con el objeto de delimitar una nueva parcela de equipamiento sanitario privado (sistema local) en terrenos de propiedad municipal situados en la prolongación de la avenida Gómez Laguna, junto al Estadio Miralbueno-El Olivar. Los firmantes del Recurso son: la Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza (FABZ), la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Aragón (ADSPA), Izquierda Unida, Zaragoza en Común, Podemos, Chunta Aragonesista, Confederación General del Trabajo (CGT) y Ecologistas en Acción.
Juan Carlos Crespo, responsable del Área de Urbanismo de la FABZ, ha señalado en primer lugar que "si bien sería comprensible que una entidad privada solicitara esta modificación del Plan, resulta sorprendente que sea el propio equipo de gobierno de parte quien la haya planteado sin justificación alguna en base al interés público".
"Sorprende también -ha destacado- la rapidez y el secretismo con que se ha tramitado si se compara con la Modificación 176, relativa a los locales de planta baja, iniciada en la misma fecha, y que a día de hoy solo ha sido aprobada inicialmente", ha añadido.
Para Juan Carlos Crespo, se trata de una política que solo se puede calificar de “urbanismo a la carta para favorecer los intereses de grandes grupos económicos privados”. En relación a estos, ha señalado como ejemplo que uno de los que se postulan al concurso de adjudicación de los terrenos ha sido condenado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos a una multa de 206 millones de euros por prácticas corruptas en diversos estados europeos, entre ellos el español.
El representante de la FABZ ha destacado asimismo la oposición de todos los grupos municipales de progreso a esta modificación, las intervenciones de la FABZ y la Asociación en Defensa de la Sanidad Pública en el Pleno municipal en el que fue aprobada, y la manifestación del pasado junio en la capital aragonesa, muestras del generalizado rechazo social y ciudadano que ha suscitado esta política del actual equipo de gobierno municipal.
Por su parte, Isabel Monserrat, de la ADSPA, ha insistido en que "la situación sanitaria de nuestra ciudad no necesita de manera alguna un nuevo hospital privado, sino, al contrario, el reforzamiento de la sanidad pública, como la actual pandemia del COVID-19 ha demostrado una vez más".
"Es urgente –ha dicho- volver a las ratios que teníamos antes de la crisis de 2008, reforzando en material y personal la sanidad pública, impulsando los hospitales de Teruel y Alcañiz -que aliviarían la carga de trabajo de los hospitales zaragozanos- y reforzando la Atención Primaria". La portavoz de la ADSPA ha destacado el "nulo papel" que la sanidad privada ha tenido ante la pandemia –sobre todo en la primera fase- derivando sus pacientes hacia la pública, incluso para la realización de PCRs.
Ante la pandemia, asimismo, ha denunciado la suspensión de tratamientos habituales, el cierre de quirófanos o la sobrecarga en los Centros de Salud y la Atención Primaria, cuestiones que han provocado el brutal crecimiento de las Listas de Espera. “Atender esta situación, dotar de recursos a nuestra sanidad, es utilidad pública, construir un nuevo hospital privado no”, ha concluido.
