El presidente electo de Uruguay, Tabaré Vázquez, anunció este viernes la formación del Grupo de Trabajo por Verdad y Justicia, integrado por líderes de diversos colectivos sociales, con el objetivo de esclarecer los crímenes cometidos durante la dictadura militar uruguaya (1973-1985).
Vázquez afirmó en una rueda de prensa que el fin fundamental de este grupo será "trabajar en el tema de los ciudadanos y ciudadanas uruguayos desaparecidos", que se calculan en "más de 200", tanto en el país latinoamericano como fuera de sus fronteras.
La conformación de esta comisión responde a "razones éticas, morales, profundas, humanísticas de nuestra sociedad en su conjunto de seguir trabajando, aportando y buscando la verdad y la justicia en este tema tan sensible para la población uruguaya", aseguró Vázquez, respaldado por el vicepresidente electo, Raúl Sendic -hijo de Raúl Sendic Antonaccio, militante histórico del Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros-.
"Es un compromiso formal que hemos adquirido como fuerza política y también personalmente", añadió adelantando que el grupo será oficializado después del próximo 1 de marzo, una vez sea investido presidente, y que dependerá de Presidencia.
Vázquez defendió que con esta comisión pretenden "avanzar más de lo que se ha hecho hasta el momento", pero sin marginar a las organizaciones involucradas en estas investigaciones, a las que consultarán "permanentemente".
Entre los cometidos de esta comisión se encuentran el análisis de los archivos existentes, la búsqueda de la información relevante y la reconstrucción de los delitos a partir del testimonio de las víctimas, sus familiares o simples testigos. Toda la información existente y la que se logre incorporar será digitalizada con un programa informático, que agilizará su procesamiento y análisis.
Asimismo, la comisión deberá instrumentar el seguimiento del cumplimiento de las sentencias dictadas contra el Estado, tanto a nivel nacional como internacional, y analizar las leyes y medidas de reparación.