Tras más de 40 años en cargos públicos el que fuera vicepresidente y ministro de Economía en plena crisis económica se sacude la responsabilidad y asegura que de no existir las puertas giratorias sería una “desgracia” para la política
Tras más de 40 años en cargos públicos el que fuera vicepresidente y ministro de Economía en plena crisis económica se sacude la responsabilidad y asegura que de no existir las puertas giratorias sería una “desgracia” para la política