Escucho pasar los aviones preñados de bombas… y me molestan. Ya sólo me molestan. Antes, yo era joven, creía que era imposible vivir en un sitio donde los ejércitos se entrenaban para matar, para matar mejor. Ahora ese ruido que hace vibrar las ventanas de mi casa, sólo me molesta. - Ama, ¿qué es ese ruido?-, me dice mi hija. Y yo la miro en silencio, no quiero decirle que es sólo un ruido molesto; tampoco quiero asustarla. Durante el recreo los niños y niñas de mi clase miran los aviones pasar. Sólo los más pequeños se asustan, los mayores …