El concierto forma parte de la Campaña , que lanzaron en 2016 las dos plataformas con apoyo del Ayuntamiento de Zaragoza. Durante tres años, esta campaña ha visibilizado la situación de las personas migrantes y refugiadas, explicando las causas, las dificultades del trayecto y los procesos de acogida al llegar a destino. “Consideramos que la sensibilización es esencial para frenar los discursos del odio que resurgen en Europa”, se ha apuntado en la rueda de prensa.
El objetivo del concierto fue descubrir una realidad oculta a un público mayoritariamente joven. Además, se decidió que la recaudación del evento se destinara íntegramente a tres proyectos de apoyo a las personas refugiadas y migrantes.
Oriol Gavín, portavoz de la Campaña, ha resaltado que los tres proyectos elegidos “reflejan diferentes situaciones del refugio que queremos visibilizar: un campo de refugiados en África, un espacio de tránsito y espera para llegar a Europa, y el proceso de integración en Zaragoza”.
Por su parte, Eusebio Villaescusa, de la ONGD PROYDE, ha hablado de la situación que se vive en el campo de refugiados de Riimenze en el Sur de Sudán. “En un año, lo que era una granja-escuela, se ha convertido en un campo de refugiados que acoge a siete mil personas, la mayoría ancianos, niños y mujeres”, ha dicho. “En este tiempo los esfuerzos se han centrado en garantizar la vida de las personas, con un cercado para que no entren las partes armadas dentro del campo, en cubrir las necesidades básicas: agua, alimentos y sanidad (para que hubiera agua hubo que hacer varios pozos) y ayudándolas a superar los traumas de la violencia vivida”, ha añadido.
En la rueda de prensa también ha intervenido Ernesto García Maleno, del Colectivo Caminando Fronteras, que ha agradecido “desde el otro lado de la Frontera Sur el gesto de apoyo a este proyecto en el que se trabaja con comunidades de migrantes ya organizadas entre sí”.
Caminando Fronteras es conocido sobre todo por el monitoreo de pateras a la deriva y su coordinación con Salvamento Marítimo para salvar la vida de las personas que van en ellas. También trabajan con Brigadas de Salud (especialmente en salud reproductiva y sexual y en el apoyo a mujeres víctimas de abusos en el trayecto), Brigadas de Educación y de Derechos Humanos.
García Maleno ha finalizado su intervención recordando la criminalización que están viviendo, y ha hecho mención de la situación que vive su compañera, Helena Maleno, que puede llegar a enfrentarse a cadena perpetua por dar las alertas de pateras a la deriva.
Por último, Julia Ortega, de ACCEM, ha recordado que “aunque parezca que cuando las personas migrantes y refugiadas llegan a Zaragoza ya han alcanzado el final del viaje, en realidad se inicia otro proceso complicado”. “En los últimos tiempos España ha hecho un esfuerzo de acogida a personas refugiadas ampliando el número de plazas del Sistema de Acogida”, ha puntualizado. “Aún con ello, a veces los tiempos son insuficientes. Para esas situaciones ACCEM ha abierto un programa de acogida complementaria a personas refugiadas en Zaragoza, con el que apoyar a las personas que han salido del Programa estatal pero aún no tienen la autonomía suficiente”, ha concluido.
Tras las palabras de las personas representantes de los tres proyectos, se ha procedido a la entrega de los cheques con el importe de la recaudación (2.559,09 euros para cada uno de los tres proyectos) y se ha hecho una foto de familia.
