Rivarés propone sancionar a la empresa de las butacas del Teatro Principal por el retraso en su colocación

El Patronato Municipal de Artes Escénicas y de la Imagen tomará una decisión en su próxima Junta. La empresa adjudicataria debía haber finalizado la colocación del mobiliario la semana pasada. Los trabajos no obstante estarán finalizados para el arranque de la temporada teatral el próximo 28 de septiembre.

Foto: AZ

Las nuevas butacas del Teatro Principal de Zaragoza estarán instaladas esta semana para el arranque de la temporada, "es decir, dos semanas más tarde de lo establecido en el contrato con la empresa adjudicataria", critica Fernando Rivarés.

Figueras Seating Solutions debía haber finalizado los trabajos hace dos semanas pero no ha sido así, según ellos mismo asumen, por problemas con terceros. La empresa comunicó al Ayuntamiento de Zaragoza el retraso el 12 de septiembre. El consejero de Cultura, Fernando Rivarés trasladó esta situación a los Servicios Jurídicos para que determinaran cómo proceder y dar traslado a la Junta del Patronato de Artes Escénicas y de la Imagen.

La Junta del Patronato se reunirá el próximo jueves y en él el consejero propondrá incoar expediente sancionador y sancionar a la empresa por incumplimiento en el plazo de entrega fijado en el contrato por el que le fue adjudicado el suministro e instalación de las butacas el pasado mes de junio.

Finalizada la fabricación del mobiliario, las nuevas butacas llegaron el sábado al Teatro Principal para proceder a su colocación, una vez que están finalizados los trabajos preparatorios del espacio. De esta forma los nuevos asientos estarán listos para el día 28, cuando arrancará la temporada teatral.

El pasado mes de julio se procedió a la retirada de las antiguas butacas de 1940 realizadas por el taller de Loscertales. En su lugar la platea del Principal "pasará a contar esta temporada con 362 nuevos asientos más cómodos y modernos, adaptados a la estética del teatro pero ajustados también a la normativa vigente para este tipo de equipamientos, que exige tener en cuenta, entre otras cuestiones, la reserva de plazas para personas con movilidad reducida", explica Rivarés.

Las antiguas butacas, propiedad del Ayuntamiento, permanecen almacenadas para proceder a su valoración. El consistorio conservará en propiedad algunas de ellas como parte del patrimonio cultural mueble municipal y procederá a enajenar mediante subasta pública el resto, tal y como establece la ley de Administración Local de Aragón.

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