Emoticores es el nombre de la propuesta que acoge esta semana el Teatro de la Estación. Se trata de una delicada pieza de danza pensada para todos los públicos, en especial los y las pequeñas de la casa (a partir de los seis años) y que conjuga varios elementos para enseñar a los y las chavalas a identificar sus emociones.
El objetivo del espectáculo se vislumbra ya desde el título, que combina conceptos como colores, emoción y cuerpo. En la coreografía las emociones toman forma a través del color y el movimiento que, coordinado con el sonido y las proyecciones audiovisuales, trata de ayudar a los niños, a las niñas y a su entorno familiar a reconocer lo que sienten.
Al igual que las personas adultas, las personas jóvenes necesitan espacios donde reconocerse y expresarse afectiva y emocionalmente. En este sentido, el trabajo con los colores se presenta como excelente herramienta para ilustrar e identificar aquellos espacios emocionales que necesitan ser expresados y atendidos. El color, las formas, el movimiento… son el lenguaje del inconsciente donde reside lo emocional, donde a veces no llega la palabra.
Emoticores, dirigida a todos los públicos, especialmente a pequeños y pequeñas desde seis años, llega de la mano de Las Tricotouses, una compañía compuesta por Cristina Montero y Rut Balbís. Ambas son bailarinas, coreógrafas y docentes con una larga trayectoria en la danza contemporánea para niños y niñas y personas adultas.
Montero como intérprete y coreógrafa, ha trabajado con Teatro do Morcego, Cía. 40 Pasos, Cía San&San, Cía. Bucanero, Cía. Trespasando y en su faceta docente es profesora de la Escola de Formación de actrices e actores de Narón desde 2003 y docente y coordinadora de la Escola de Danza Contemporánea de Narón desde 2009.
Balbís también es creadora y coreógrafa y da clases en el Aula de Danza de la Universida de A Coruña desde 2005, además de colaborar con otras compañias como Matarile Teatro, Licenciada Sotelo, Lipi Hernández, Traspediante.