El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, acompañado del consejero de Urbanismo y Sostenibilidad, Pablo Muñoz, ha visitado esta mañana las obras de rehabilitación del Mercado Central de Lanuza de Zaragoza, que comenzaron el pasado 11 de junio y que, según el propio consistorio “avanzan a buen ritmo cumpliendo los plazos y objetivos previstos”.
Los trabajos están siendo ejecutados por la empresa Ferrovial Agromán, S.A., con un importe de adjudicación de 8.703.945 euros. Esta propuesta fue la que se alzó ganadora entre las nueve que participaron en el proceso de licitación. “Ofertó una reducción de 30 días naturales en el plazo de ejecución, y un aumento del período de garantía de 3 años, sobre el mínimo de 2 años exigido en los pliegos de condiciones”, apunta el Ayuntamiento de la capital aragonesa.
Las obras se refieren exclusivamente a la rehabilitación del edificio que, como se sabe, está catalogado como Bien de Interés Cultural, y que cuenta con una antigüedad en su construcción de más de 100 años.
El Gobierno de Zaragoza ha estimado que todo el proceso de rehabilitación, recuperación y puesta en servicio del Mercado Central, incluido el mercado provisional, supone una inversión aproximada de unos 15 millones de euros.
Las obras de rehabilitación del Mercado Central “Lanuza” iniciaron sus preparativos el pasado día 4 de junio con las labores de vallado e implantación de casetas de obra, comenzando oficialmente el día 11 de junio.
“Desde esa fecha se han venido desarrollando, entre otras, diversas tareas de comprobación de la antigua estructura, en especial del forjado y de la base de los pilares, tarea que ahora se puede realizar más fácilmente que durante el período de los estudios anteriores, ya que el Mercado se encontraba en plena actividad”, señala el ayuntamiento. “Estos trabajos prosiguen todavía, para conseguir una imagen fiel del estado del inmueble”, añade.
“Paralelamente, se ha venido desmontado la cerrajería exterior de las diversas puertas, que han sido debidamente numeradas y protegidas de cara a su restauración”, apunta el consistorio. También se están realizando labores de investigación de las distintas capas de pinturas aplicadas a las partes metálicas a lo largo de la vida del edificio, con el objetivo de “averiguar cuál fue el color original del Mercado en su inauguración en 1903, tal y como prescribió la Comisión Provincial de Patrimonio Cultural y aconsejan los actuales criterios de restauración”.
Al mismo tiempo se han iniciado ya las tareas de desmontaje de instalaciones y de demolición de los antiguos puestos, túneles de pasillos y mamparas exteriores, elementos implantados todos ellos en la reforma anterior de 1982, tareas que durarán entorno a un mes.