La AN condenó en julio de 2016 al presidente de Afinsa, Juan Antonio Cano, a 12 años y diez meses de prisión y multa de 240.000 euros por estafa agravada, insolvencia punible, falsedad contable, blanqueo y delito contra la Hacienda Pública al considerarlo autor material de la estafa piramidal que afectó a unas 200.000 personas ahorradoras que invirtieron en sellos de la filatélica, intervenida judicialmente en mayo de 2006.
La AN también condenó a otros diez acusados, entre ellos los exconsejeros Albertino de Figueiredo, fundador de Afinsa, y su hijo Carlos, como autores de estafa, insolvencia punible y falsedad contable, a 11 años y once meses y 11 años de cárcel respectivamente y multa de más de 100.000 euros.
Posteriormente el Tribunal Supremo estimó parcialmente los recursos de los condenados y redujo en parte las penas. La condena para el expresidente Juan Antonio Cano pasó a 8 años y siete meses de cárcel, casi cuatro años menos.
Además, Emilio Ballester resultó condenado a 8 años y 4 meses como cooperador necesario, y Francisco Guijarro Lázaro a dos años de prisión y multa de 17,7 millones de euros por blanqueo de capitales; resultaron absueltos como partícipes a título lucrativo Ramón Egurbide y los hijos de Guijarro, Rubén y Natalia.
La condena a la cúpula de Afinsa puso fin a un proceso que se prolongó durante una década, desde la intervención en mayo de 2006 de esta sociedad de inversión en bienes filatélicos, junto con Fórum Filatélico. El juicio a esta segunda organización se inició el pasado mes de septiembre y está previsto que se prolongue al menos hasta la primavera de 2018.