El Pleno del Ayuntamiento de Zaragoza ha rechazado este viernes una moción presentada por Zaragoza en Común, en la que se pedía instar al Gobierno de Aragón a que volviese a introducir la moratoria para grandes superficies comerciales que derogó en el año 2005. La moción, apoyada por entidades vecinales, sociales, de comerciantes y sindicales, ha sido rechazada por los votos en contra de PP, PSOE y Ciudadanos y la abstención de Chunta Aragonesista (CHA).
El sindicato OSTA, que se postula en contra de la instalación de nuevas grandes superficies en Zaragoza, intervino en el Pleno para explicar las afecciones a las condiciones laborales del sector que ha supuesto el crecimiento de los centros comerciales en la ciudad.
Desde OSTA aseguraron que “la instalación de una nueva gran superficie no supone un aumento de empleo, cuando nos dicen eso nos intentan engañar con una media verdad, todo lo que se crea se destruye en otro sitio, por tanto no hay un aumento neto de puestos de trabajo”. Asimismo, el sindicato aragonés añadió que “la instalación de estos complejos supone una radical y extrema transformación de las condiciones laborales del sector, las precariza con la aplicación de convenios que no incluyen incrementos salariales, permiten la subcontratación y la temporalidad a gran escala, y no compensan los domingos y festivos trabajados, cosa que los convenios negociados y firmados en Aragón sí hacen”.
A pesar de que la moción fue rechazada, desde OSTA creen que “está claro que sobran los centros comerciales, que son más que suficientes, nos salen por las orejas. Y eso lo sabemos todos y todas, y los primeros los trabajadores y trabajadoras de Aragón”. Finalmente, esperan que cuando el debate se traslade a las Cortes de Aragón, los grupos hagan un “ejercicio de responsabilidad” y que “no tiren balones fuera”.
IU Aragón reafirma su apuesta por la reimplantación de la moratoria
En este sentido, Izquierda Unida, a través de su portavoz en las Cortes, Patricia Luquin, ha anunciado este viernes que su formación va a presentar iniciativas para la reimplantación de esta moratoria, como la presentada por Zaragoza en Común (ZeC) en el Pleno.
De esta forma, Luquin ha reafirmado la apuesta de IU por reimplantar en Aragón la moratoria para la construcción de grandes superficies comerciales. Una moratoria que se derogó en 2005 y que IU rechazó en el Parlamento aragonés, "siendo el único grupo parlamentario que mostró su oposición a este modelo de consumo que ha demostrado su fracaso y su incidencia negativa en el comercio de proximidad", ha recordado.
"Sobre la capital aragonesa -ha explicado Luquin-, Zaragoza es la ciudad del Estado con la mayor concentración de centros y superficies comerciales, tal y como indica el informe de la consultora internacional JLL sobre distribución de estos centros de ocio. Comenzó el 2015 con 628 metros cuadrados de superficie comercial por cada 1.000 habitantes, una cantidad que casi dobla la que se da en el conjunto estatal (358), y a la que solo siguen Murcia, con 536 metros cuadrados y Madrid con menos de 500".
En total la ciudad tiene 628.112 metros cuadrados repartidos en 16 centros tras la apertura de la última superficie comercial dedicada al bricolaje abierta a mitad de año y acoge el centro comercial más grande de la península con más de 200.000 metros cuadrados. "Desde el fin de la moratoria a la instalación de centros comerciales que se produjo en 2005, se ha triplicado el número de metros cuadrados de estas superficies, produciéndose una sobresaturación en este mercado que ha incidido en los problemas que está causando para el pequeño comercio y por cada puesto de trabajo que se crea en una superficie comercial, se destruyen dos en el comercio de proximidad", ha incidido Luquin.
"Así -añade-, desde la apertura de Puerto Venecia, se han destruido más de 6.500 empleos cuando en las mejores previsiones del macrocentro comercial se habla de crear 4.000 puestos de trabajo".
“Sabemos que el pequeño comercio tiene el doble de personal contratado que las grandes superficies y que, además, ese empleo es de una mayor calidad que el generado por las segundas” ha apuntado la diputada de IU que ha enfatizado que “la propia desaparición del comercio de proximidad conlleva que nuestros barrios sean menos habitables y que la dependencia del vehículo privado sea mayor, renunciando a consolidar una ciudad compacta y más habitable”.
