La Sugerencia del Justicia responde a la queja de una familia sobre la caducidad de las aplicaciones informáticas que incluyen los libros de una determinada editorial para realizar ejercicios complementarios a través de una plataforma on line. Según se recogía en el escrito de queja remitido a la Institución, al intentar activar la licencia al curso siguiente al de su adquisición para un hermano más pequeño, ésta había caducado teniendo que volver a adquirirla.
En opinión de esta familia, compartida por la Institución, esto supone "un perjuicio económico en caso de que el niño tenga hermanos que le siguen y contradice el valor educativo de la reutilización del material escolar". Además, añade el Justicia en su Sugerencia, se dificulta el sistema de préstamo de libros de texto previsto por la propia Administración.
La Institución recuerda a la Administración educativa su competencia de supervisión de libros de texto y materiales curriculares y hace hincapié en la opinión pública mayoritaria que defiende un periodo de validez editorial de los libros lo más amplio posible, extendiendo su vigencia de 4 a 5 años.
Fernando García Vicente concluye su escrito recordando que los libros de texto son una herramienta de aprendizaje necesaria para garantizar el derecho fundamental a la educación, recogido en el artículo 27 de la Constitución española y cuya compra, para muchas familias, supone un importante esfuerzo económico.