La Plataforma en Defensa de la Escuela Pública, integrada por organizaciones de madres y padres, estudiantes y sindicatos de enseñanza, se ha concentrado este martes en la capital aragonesa para volver a reclamar la derogación de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) y contra los recortes en educación, que cifran en 9.000 millones de euros desde el inicio de la crisis.
De esta forma, más de un centenar de personas han reclamado en Zaragoza más inversiones en la educación pública y la consiguiente paralización de los recortes en este ámbito.
Por su parte, el portavoz de la plataforma en Zaragoza, David París, ha expuesto los motivos de la movilización en contra de la LOMCE. Una ley cuyo único logro, a su juicio, “ha sido poner en su contra a toda la comunidad educativa".
Al mismo tiempo, el portavoz de la plataforma también ha subrayado la necesidad de un aumento retributivo al profesorado, ya que los datos reflejan que los salarios de los y las docentes de Aragón se encuentran "en antepenúltimo lugar" en relación al resto de territorios del Estado español.
Por una educación feminista
La Plataforma Estudiantes en Movimiento también ha tenido presencia en la movilización, y lo ha hecho para reivindicar una educación feminista, libre de violencias y con mecanismos efectivos para asegurarlo, con unos programas en los que las mujeres sean representadas en los temarios, donde los contenidos con perspectiva de género sean transversales a todas las asignaturas y exista formación afectivo-sexual feminista en la escuela pública.
Por otro lado, y a través de un comunicado, esta plataforma estudiantil ha anunciado que no se sumará a la convocatoria de huelga el 10 de mayo, ya que consideran que ha sido planteada desde el “oportunismo político” y añaden, que es el propio 8M el que ya está organizando acciones en contra de esta sentencia: “Han salido miles de mujeres a las calles estos días consiguiendo que se plantee la revisión del código penal a este respecto, mostrando que con la fuerza y sororidad de las mujeres podemos cambiar el mundo, como ya demostramos que podíamos pararlo el 8 de marzo”.