Con una acción contra las privatizaciones, los proyectos faraónicos y el fracking concluye el congreso confederal de Ecologistas en Acción

El "Baile de la Ura" (agua) recorrió el lunes las plazas y calles de Lizarra para concluir con la colocación de una pancarta gigante en una peña muy vivisble de la localidad navarra. La tela, de más de ocho metros, reivindica unos ríos vivos y protesta contra proyectos faraónicos en Navarra y Aragón. Más de 200 personas participaron en la acción con la que concluyó el congreso confederal de Ecologistas en Acción.

Pancarta desplegada por Ecologistas en Acción en Lizarra. Foto: Ecologistas en Acción (Archivo)
Pancarta desplegada este lunes por Ecologistas en Acción en Lizarra. Foto: Ecologistas en Acción
Pancarta desplegada este lunes por Ecologistas en Acción en Lizarra. Foto: Ecologistas en Acción

El "Baile de la Ura" (agua) recorrió el lunes las plazas y calles de Lizarra para concluir con la colocación de una pancarta gigante en una peña muy vivisble de la localidad navarra. La tela, de más de ocho metros, reivindica unos ríos vivos y protesta contra proyectos faraónicos en Navarra y Aragón. Más de 200 personas participaron en la acción con la que concluyó el congreso confederal de Ecologistas en Acción.

"Yesa ez, Ibaiak bizirik, Canal no" (Yesa no, ríos vivos, canal no), puede leerse en grandes letras blancas sobre fondo azul en la pancarta desplegada por escaladores de la organización en la Cruz de los Castillos para protestar contra el recrecimiento de la presa de Yesa y el Canal de Navarra.

"No queremos el Canal de Navarra, ni más proyectos faraónicos de despilfarro del dinero público, que son la riqueza de pocos y la miseria de muchos. Ni tampoco un recrecimiento de la presa de Yesa. El mundo rural merece otro trato", se aseguró en el manifiesto leído al término de la acción. Además de las problemáticas de la zona, la acción, que reunió a ecologistas de todos los territorios del Estado, mostró su oposición a otras amenazas en torno al agua: el fracking, los procesos de privatización en muchos municipios, la agroindustria que sobreexplota los recursos hídricos. "El agua no es una mercancía, es un derecho humano y un bien común", se reivindicó durante el recorrido por Lizarra.

El tradicional "Baile de la Era" se convirtió en el "Baile de la Ura" en las plazas de la localidad. Vestidos de blanco y con pañuelos azules, las y los participantes en la acción formaron círculos y parejas para bailar y corear frases a favor del agua. Fragmentos teatrales fueron representados a lo largo de la acción, que ocupó buena parte de la mañana del lunes.

Se dedicó un especial homenaje a Ladislao Martínez, Ladis, uno de los fundadores de Ecologistas en Acción, fallecido hace tres días. "Él, que trabajó incansablemente contra la privatización del agua en Madrid, hubiese querido participar en una acción tan cercana a su lucha", como se recordó.

La acción marcó el final del congreso confederal de Ecologistas en Acción en Lizarra. La elección de una nueva secretaría, los debates internos, las mesas redondas han ocupado los últimos tres días del encuentro.

Foto: Ecologistas en Acción
Foto: Ecologistas en Acción

Texto del manifiesto leído durante la acción:

Nos cambiamos los pañuelos rojos de sangre al azul del planeta Tierra porque sentimos el expolio de nuestras aguas como una herida abierta en la piel. Del "Baile de la Era" al "Baile de la URA", en defensa de las aguas que deben fluir de la montaña al río... porque son la sangre de la Tierra.

El agua es un bien común, un derecho universal de todas las personas.

No queremos el Canal de Navarra, ni más proyectos faraónicos de despilfarro del dinero público, que son la riqueza de pocos y la miseria de muchos. Ni tampoco un recrecimiento de la presa de Yesa. El mundo rural merece otro trato, que el objetivo debe ser la producción de alimentos de calidad en manos de pequeños agricultores para el consumo local a la vez que se cuida el entorno y se mantienen los pueblos y la gestión común del medio y no los beneficios de las empresas "propietarias" del agua y de la agroindustria a costa del dinero público.

El precio que pagaremos todas y todos los navarros por el Canal de Navarra en los próximos 50 años se eleva a 3.800 millones de euros. Este despropósito se está convirtiendo en un pozo sin fondo para la Madrid, 04 de diciembre de 2014 Hacienda navarra, que está devorando los presupuestos de agricultura, lo que ha provocado el recorte o la desaparición de muchas partidas imprescindibles para gran número de agricultores/as y ganaderos/as como las de ganadería extensiva, agricultura ecológica, zonas de montaña, CUMAS o Red Natura, precisamente las destinadas a apoyar el manejo agroganadero más sostenible y social.

También creemos que las aguas de los acuíferos de Antzin deben alimentar al rio Ega y sus gentes, como siempre ha sido, mientras que estas por su parte tienen el deber de hacer un uso racional del agua y mantener el río limpio y libre de contaminantes. La solución a la contaminación de los ríos pasa por dejar de contaminarlos, y no por abandonarlos y buscar el agua de calidad en otros ríos.

Reivindicamos de nuevo unos montes y valles libres de fracking, que la calidad del aire y de las aguas subterraneas es muchísimo más valiosa que el miserable retardo del pico del petroleo y los beneficios bursátiles de sus burbujas especulativas. El fracking en nuestra tierra destrozaría nuestros acuíferos y manantiales, contaminando de forma irreversible sus aguas con compuestos altamente tóxicos, lo que repercutiría en detrimento de las personas y del medio natural.

Un aplauso a las gentes de Lerín, que han conseguido paralizar la extensión del Canal de Navarra a sus regadíos de la cuenca del Ega. Y un recuerdo especial al grupo de agricultores y propietarios/as en contra del regadío del Sur de Montejurra, pioneros en la paralización de proyectos desarrollistas en Tierra Estella.

Hacemos un llamamiento a movilizarnos contra el Canal de Navarra, a volver masivamente a la calle como en su día se hizo con Itoiz, ejemplo de lucha y resistencia.

En definitiva, defendamos lo común: por un mundo rural y unos ríos vivos.

No a la privatización y mercantilización de las aguas.

El agua es un derecho universal de todas las personas.

No al Canal de Navarra.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de nuestra política de cookies, pincha el enlace para más información.

ACEPTAR
Aviso de cookies