El sábado 7 de febrero, organizadas por la Asociación de Nabateros del Sobrarbe, comenzarán en Fiscal las tareas necesarias para realizar el descenso de Nabata en la Galliguera.
Las tareas que realizan las y los nabateros durante estas primeras jornadas de trabajo, son cortar las sargas o verdugos, ramas flexibles que serán humedecidas y enrolladas, para atar la nabata.
En los días anteriores al descenso en nabata, en el antiguo molino de Morillo de Galligo, se preparará la nabata con el trabajo de placha: adobar la madera, preparar la mortaza y barrenar, montar los conchez y los maderos para atar.
Para finalizar la construcción de la nabata, ya en el día de su descenso, que este año será el domingo 26 de abril, hay que aguar los trampos, acoplarlos, poner las remeras, los remos y el ropero.
Este 2015 será la decimotercera vez que la nabata d’a Galliguera navegue el Galligo, desde su recuperación. Para ello es necesario el trabajo y colaboración de nabateros y nabateras, así como otras muchas personas voluntarias que realizan trabajos de apoyo importantes para que esta actividad se pueda realizar.
Desde la Asociación de Nabateros d’a Galliguera recuerdan que gracias a esta asociación se ha recuperado un siglo después una tradición casi perdida, además de consolidar una actividad con un importante atractivo cultural y turístico en la comarca de la Plana de Uesca.
Las nabatas dejaron de navegar por el Galligo en la primera década del siglo XX, tanto por la construcción del Embalse de La Peña como por la llegada del ferrocarril, que permitía un transporte más rápido y cómodo.
Este mes de abril, de nuevo podremos ver la nabata llegar hasta Santolaria de Galligo, con la intención de seguir demandando un río vivo, especialmente en un año tan complejo para el Galligo como este, con la contaminación por lindano y la amenaza constante de la construcción del embalse de Biscarrués.