La portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, Marina Albiol, cree que ha quedado demostrado que la misión de la OTAN en el Mar Egeo "no está diseñada para salvar vidas, sino para que los buques de guerra construyan una frontera marítima" y así "trasladar todo el drama de los refugiados a Turquía".
La Alianza Atlántica ha publicado este jueves en un comunicado los objetivos de su despliegue en aguas turcas y griegas. "Un comunicado completamente contradictorio", según Albiol, que primero "afirma que la OTAN no está allí para devolver los barcos" a Turquía, e inmediatamente después dice que "los refugiados que atraviesen el mar desde Turquía serán devueltos allí".
"El hecho de que la OTAN vaya hacer esto demuestra lo que ya veníamos diciendo: la militarización del Mediterráneo no tenía como objetivo salvar a los refugiados sino levantar nuevas fronteras, una frontera en el mar", ha advertido.
"No nos vamos a cansar de insistir en que Turquía no puede ser considerado un país seguro y que la única medida urgente que a corto plazo puede mejorar la situación es abrir vías seguras y legales para llegar a Europa", ha afirmado.
Albiol ha recordado que "esta actuación de la OTAN supone un incumplimiento más de la obligación de la UE con las personas que huyen de las guerras" y cree que "es una medida tomada desde la insolidaridad y para contentar a gobiernos europeos como el de Austria o Hungría, mientras aíslan a Grecia". La eurodiputada se ha solidarizado así con el pueblo griego, después de que Austria, Eslovenia, Croacia, Bulgaria, Albania, Bosnia, Kosovo, Macedonia y Serbia decidieran de forma unilateral esta semana reducir el paso de refugiados por sus fronteras.
También se ha referido a la aprobación este jueves en el Parlamento alemán de la nueva ley sobre asilo, que aumenta las restricciones para la reunificación familiar, algo que, "en el momento actual, puede suponer un duro golpe al ya fallido plan de reubicación de la UE".
Por otro lado, en los últimos día, Médicos Sin Fronteras ha alertado de que cada vez son más pequeñas las embarcaciones que llegan a la isla griega de Lesbos, lo que implica que "los refugiados van a intentar seguir llegando a Europa de cualquier forma". Además, este tipo de botes y barcas neumáticas "son indetectables para los radares tal y como nos confirmó la Guardia Costera griega en nuestra visita", lo que supone "un doble peligro", puesto que los grandes buques de Frontex y la OTAN "pueden llegar a hundirlos" sin querer y, "obviamente, porque son mucho menos estables".
Según los cálculos de Acnur, sólo el martes llegaron a las islas griegas de Lesbos, Kos y Chios 3.474 personas. En lo que va de año, 101.906. También se ha incrementado el número de menores de edad, que ya representan el 34% total de los refugiados en 2016, y de mujeres, un 20%.
